Coralcore es el nombre de la microtendencia que se está colando en joyeros y editoriales, con una estética inspirada en el mundo marino: colores cálidos como el coral, azules y rosas empolvados que convierten las joyas en pequeños amuletos de verano eterno.
Más que una moda pasajera, el coralcore propone una conexión entre naturaleza y diseño contemporáneo. Las piezas no replican conchas o peces literalmente, sino que sugieren paisajes submarinos, arrecifes, aguas cristalinas o la luz que se filtra bajo la superficie. Una propuesta sensorial que nos transporta al Mediterráneo más íntimo.
Entre las firmas que han sabido interpretar esta corriente está Alexah, que, con su enfoque artístico y una clara inspiración mediterránea, ha lanzado una colección que se alinea perfectamente con el espíritu del coralcore. Aquí, cinco piezas que capturan esa esencia marina con frescura y carácter:
El coralcore no busca imponerse con estridencia, sino colarse con naturalidad en los gestos cotidianos del verano. Una forma de llevar el mar encima, sin disfraces, a través de piezas que hablan del sol, del agua salada y de la belleza espontánea.