El Madrid olvida en Milán el tropiezo del martes

El Real Madrid recuperó el ritmo de los dos primeros partidos de la Euroliga (perdido el martes pasado en el derbi en casa contra Baskonia) para sumar su tercer triunfo del curso, en la pista de un EA7 Milán que siempre fue a remolque de los blancos.
Y es que el tropiezo ante sus aficionados fue un duro golpe en las filas del equipo de Pablo Laso. Un encuentro en el que no fue capaz de culminar una difícil remontada, y que dejó mal sabor de boca en la escuadra merengue. Sin tiempo para lamentaciones, y con un desplazamiento a Milán por delante, el Madrid se volvió a poner manos a la obra y ayer recuperó las buenas sensaciones, y certificó que puede ser uno de los fuertes de la gran competición continental.
El acierto en ataque fue el gran aliado del equipo español ayer en tierras lombardas. Superar los cien puntos no es algo sencillo, pero parece que el Madrid este año quiere explotar al máximo su poderío ofensivo. Mientras que el Milán dependía en exceso de la actuación de Hickman y Sanders, el cuadro blanco tuvo a varios jugadores por encima de los diez puntos: no solo clásicos como Carroll, Llull o Rudy fueron fundamentales, sino que otros como Randoplh y Hunter también aportaron dobles dígitos.
Y, con ese ritmo anotador, al conjunto transalpino le costó mucho que su rival no se escapara. Se esforzó y luchó hasta el final, pero no pudo con un Real Madrid que ya tiene tres victorias, y que sigue en la zona privilegiada de la clasificación.
Los hombres de Pablo Laso han salvado una complicada semana europea que comenzó muy mal, pero que ha terminado con un buen resultado y un buen partido. n    redacción