“Hoxe José e Manuel voltan á casa. Que este acto sirva para que nunca máis se persiga a ninguén por defender as súas ideas”, expresó ayer el alcalde de Culleredo, José Ramón Rioboo, en la entrega de los restos de José Galán Núñez ‘Dereito’ y Manuel Ramiro Souto ‘Souto’, dos vecinos de Almeiras represaliados en 1952.
Un emotivo acto que abarrotó el salón de plenos cullerdense y en el que los familiares de los antifranquistas –asesinados durante una emboscada en Visantoña, Mesía– recibieron, visiblemente emocionados, el cariño y respeto de vecinos e instituciones. El presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), Emilio Silva, destacó el valor de estos hombres y lamentó que haya habido que esperar 50 años desde el fin de la dictadura para localizarlos: “Aquí falta muchísima gente”, dijo.
Los restos de Galán y Ramiro fueron cubiertos con sendas banderas gallegas y homenajeados con las gaitas de Os da Veira do Monte –que interpretaron el himno gallego y el del Antiguo Reino de Galicia– y la voz de Bea A de Estrella –que compuso un tema especial para estas víctimas de la represión franquista–. También se entregaron a los descendientes de los dos represaliados las botas que ambos llevaban en el momento de su muerte.
“Hemos llegado a un presente en el que hay mucha juventud que desprecia la democracia. No es algo espontáneo, algo accidental, es una consecuencia de que estos hombres no salen en los libros de texto. Alguien decidió que esta gente estorbaba”, señaló Silva, quien pidió que las botas de estos vecinos de Almeiras se exhiban “en una vitrina en el Parlamento gallego simbolizando todo lo que vivieron estas personas”.
José Galán y Manuel Ramiro fueron asesinados el 22 de junio de 1952 en Visantoña, donde quedaron en una fosa común y fueron exhumados por la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica en agosto de 2024. El alcalde de Mesía, Mariano Iglesias, mostró su “profundo recoñecemento” a estas víctimas y al ingente trabajo de la ARMH, “investigando para que estas persoas non queden no esquecemento”.
Alberto Gómez Rodríguez, sobrino de Galán, tuvo que contener las lágrimas en varias ocasiones mientras pronunciaba su discurso: “Hoxe remata un capítulo da historia familiar, co recordo dun home sensible e intelixente que foi represaliado por defender a liberdade e a igualdade social”.
Teresa Ramiro, prima de Manuel, destacó su “historia de loita e valentía” y agradeció la labor del historiador del Ayuntamiento de Culleredo, Carlos Pereira, ya jubilado, “que foi sacando os nomes dos represaliados”.
“Loitaron pola nosa liberdade. Son as palabras de veciños de Visantoña. Aquí chegan dous corpos máis que volven portar o seu nome e apelidos co respecto e dignidade que merecen”, añadió la periodista Clara Bernal, presentadora del acto, que finalizó con el entierro de estas víctimas en el cementerio de Almeiras.