El Ministerio de Fomento ha concedido al Ayuntamiento una prórroga de seis meses para llevar a cabo las obras de reforma de la Comandancia de Obras, lo que da más tiempo al Gobierno de la Marea Atlántica para encontrar una solución dialogada con los miembros del Centro Social Okupado A Insumisa. “Estamos facendo esforzos por facer un inicio das obras sen problemas. A acta de replanteo nos da unha marxe pero tampouco queremos esgotar os prazos”.
El regidor reconoció que el próximo paso es “un procedemento administrativo de recuperación da posesión”. Este procedimiento consiste en la recuperación de oficio de la que es desde hace un par de semanas una propiedad municipal. La recuperación de oficio es un recurso legal que se ejercita en caso de que el tercero haya accedido a la posesión indebidamente.
De esta manera, el Gobierno local consigue aumentar mucho el plazo original, de solo 45 días para el inicio de las obras so pena de perder la inversión de 1,3 millones de euros para la reforma que aporta el Ministerio de Fomento. Aunque el plazo máximo que otorga la prórroga son seis meses, el alcalde insiste en que confía en no tener que agotarlo: “Veremos se durante a ejecución dese procedemento administrativo temos a posibilidade de ter unha saída dialogada Queremos facelo canto antes mellor. Cando haxa novidades, as contaremos”.
“A Insumisa non se merca”
La confianza del alcalde en el diálogo contrasta con la actitud de rechazo de los okupas al proyecto municipal, las Naves del Metrosidero, con las que se pretende convertir las antiguas naves militares en un centro de ocio y cultura juvenil que ofrezca actividades parecidas a las que llevan a cabo los okupas. En una reunión abierta al público celebrada en la Ciudad Vieja, los representantes municipales incluso propusieron una gestión asamblearia para ganarse a los okupas, a lo que estos respondieron que “A Insumisa non se merca”.
Pero Xulio Ferreiro no se da por vencido: opina que en las redes sociales “se escoitan opinións dun lado e doutro”, lo que podría indicar, a su entender, que por lo menos parte de los okupas de A Insumisa estarían dispuestos a estudiar un acuerdo con el Ayuntamiento. “Eu creo que nun espazo amplo como o da Comandancia hai diferentes opinións”, analiza el regidor.
Pero parece que entre los antisistema, el rechazo a la Marea Atlántica (entre cuyos concejales hay por lo menos dos antiguos okupas) es bastante general. En un fanzine publicado por A Insumisa aseguraron que “toda intromisión institucional por parte do poder é un auténtico insulto a todo proceso colectivo horizontal”. Como muestra de ello, el sábado a las ocho de la tarde volverán a manifestarse en el Obelisco en contra del desalojo y “en defensa dos espazos liberados”.
En todo caso, la prórroga ganada significa que el proyecto de Naves de Metrosidero no verá la luz hasta el siguiente mandato, puesto que la duración estimada de las obras de reforma son 16 meses. Esa era, precisamente, una de las objeciones de los okupas al desalojo: aunque abandonaras las tres naves, hoy, tras la reforma habría que instalar el equipamiento y mobiliario, o sea que el nuevo espacio no sería funcional hasta dentro de mucho tiempo.