La capital de As Mariñas recibió con hondo pesar la defunción, a los 101 años de edad, de María Barral Rivas, quien durante años, tras tomar el testigo de sus padres, regentó la Joyería Barral de la Rúa dos Prateiros, y una de las voces destacadas de la Coral Polifónica de Betanzos, a la que se unió desde el nacimiento de la entidad, en 1969.
Hace unos años, ella misma lo recordaba así en una charla con El Ideal Gallego: “Don Manuel se acercó a una amiga y a mí, que estábamos paseando, para hablarnos de la posibilidad de crear una coral en Betanzos”. Las dos aceptaron, aunque “pensamos que era un disparate y que nunca en la vida llegaría a nada”, pero transcurrieron más de cinco decenios desde aquel comentado estreno en el Cine Capitol.
Hoy la ciudad llora a una mujer única, entrañable, que destacó por y capacidad para adaptarse a cualquier auditorio, para entender igual a los niños que a los adultos, y, sobre todo, por su entrega a Betanzos, en cuyo cementerio este miércoles se depositarán sus cenizas, a las 17.15.
El funeral, cantado por la coral polifónica, también se celebrará esta tarde, a las 18.00 horas, en la iglesia conventual de Santo Domingo.