Como cada 15 de agosto, la ciudad honró a su copatrona, Santa María –‘A Gareliña’, como la nominó cariñosamente Francisco Vales Villamarín– con una misa en O Azougue. Antes, se nombró a la representante infantil, Inés Seoane García, y el joven Mario Silva Pérez dio lectura al pregón, en que recordó a los muchos betanceiros que han marcado su infancia, desde el personal del Vales Villamarín al del Conservatorio y la Banda Municipal de Betanzos pasando por el fotoperiodista César Delgado, fallecido este mismo 2025.
Además, destacó la importancia del deporte en la ciudad y en sus gentes, mencionando a Gilsanz y a Arévalo. “Eu, desde a miña modestia, tamén son deportista. Adestro no Club Santo Domingo de baloncesto, do que me sinto moi orgulloso de formar parte”, indicó Silva, quien también evocó a ‘Tocayo’.
Así, con su emotivo pregón, se da paso a la que se prevé multitudinaria verbena de la orquesta Panorama, cuyo enorme despliegue, con varios camiones para su montaje, comenzó a primera hora de la tarde.