Si sus compañeros de trabajo le miran mal, sus amigos le rehuyen o su pareja amenaza con la separación por ese humor insufrible que gasta en las últimas semanas, sepa que la ciencia está de su lado. Cuénteles que no es más que una víctima del cortisol, la hormona que se activa con el estrés que sufre nuestro cuerpo al sentirse atacado por el calor. Y ármese de abanicos y bebidas frescas.