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sábado | 27 abril | 2024
Tras su aprobación definitiva por parte de Transición Ecológica y Reto Demográfico, se aceleran los trámites para iniciar la regeneración del espacio dunar y las marismas de la Praia Grande de Miño. Un “proxecto que inclúe un contrato de servizos” para realizar un seguimiento de control ambiental de la obra, tal y como adelantaron desde el la Subdelegación del Gobierno en A Coruña.
El alcalde del municipio, Manuel Vázquez Faraldo mantuvo un encuentro con la subdelegada, María Rivas, para analizar una actuación a la que la Administración del Estado destina 1.720.506,96 euros y que, entre otras intervenciones, contempla la integración del terreno del antiguo campo de fútbol en la marisma; la sustitución de la actual pasarela por una a ras de suelo de un material acorde con el espacio; la construcción de una nueva accesible hacia la caseta de socorrismo y la eliminación de invasoras, detallaron desde el Ayuntamiento de Miño.
En la reunión, Faraldo y Rivas estuvieron acompañados por el jefe de la Demarcación de Costas en Galicia, con el que recorrieron las dunas y las marismas para conocer de cerca el ámbito en que se actuará con la intención de revalorizar uno de los arenales más emblemáticos de As Mariñas.
De acuerdo con sus previsiones, las obras deberían estar adjudicadas antes de que acabe este año y empezar con las actuaciones a principios de 2024.
El alcalde señaló que estas obras, reivindicadas durante años por los miñenses, permitirán desarrollar “un proxecto emblemático, tanto para o futuro da poboación como para o desenvolvemento do turismo, un dos sectores claves da nosa economía” y, en este sentido, agradeció “unha inxección económica histórica nun proxecto que repercutirá no benestar da veciñanza e dos visitantes ao tempo que se promoven unhas mellores condicións medioambientais”, expuso Faraldo.
En términos similares, la subdelegada indicó que la actuación “de vital importancia para el municipio”, responde a las solicitudes del Gobierno de Miño y del propio alcalde para “revalorizar una playa tan emblemática” e incidió en que se tratará de “hacer compatible el uso de la ciudadanía y los turistas con la protección ambiental” de la Praia Grande.
En su recorrido por las dunas, donde se retirarán las invasoras y alóctonas, indicaron que también se instalarán “medidas de protección delimitando el espacio protegido con madera y cuerda, con el fin de ser coherente con el entorno” y que la tala de árboles se realizará “exclusivamente” en esta zona “debido a que son perjudiciales para el ecosistema, mientras que en el paseo se eliminarán las invasoras y aquellos ejemplares que presenten alguna enfermedad o que supongan riesgo alguno para los viandantes”, detalló Vázquez Faraldo.
La recuperación de la zona de las marismas, ocupada durante años por un campo de fútbol, será otra de las actuaciones, que se llevarán a cabo en esta regeneración con todas las precauciones necesarias para preservar los bancos de marisqueo de este área de la Ría de Betanzos.
La subdelegada recordó que por parte del Estado “la prioridad y la preocupación siempre ha sido proteger este espacio natural y recuperar esa zona de las marismas que ha implicado un arduo trabajo administrativo a lo largo de muchos años”, añadió María Rivas, que apuntó a que esta regeneración, como la protección de la playa, “es una vieja demanda del ayuntamiento, ya que este arenal, además del gran valor natural, es uno de los principales activos turísticos de Miño”.
