En los últimos días, los coruñeses se habían acostumbrado a un tiempo seco y una temperatura agradable, que hacía presagiar el comienzo del verano. Pero todo cambió bruscamente a partir de las cinco de la tarde, cuando la alerta naranja que se había anunciado se materializó y el cielo empezó a encapotarse. A última hora de la tarde, los pluviómetros habían recogido más de 16 litros por metro cuadrado, obligando a los coruñeses a sacar los paraguas si querían salir a la calle para un paseo vespertino.
26 RAYOS
cayeron en la costa frente A Coruña, pero solo dos en la ciudad, según Meteogalicia
La tormenta descargó con fuerza a primera hora de la tarde, acompañada de bastante aparato eléctrico: truenos y rayos que invitaban a quedarse en casa, aunque eso no disuadió a muchos coruñeses de acudir a los conciertos y otros eventos que estaban programados. Por lo menos bajo techo, porque el Ayuntamiento se vio obligado a cancelar todas las actividades relacionadas con el Día das Letras Galegas, como la actuación de Cántigas da Terra y Donaire en los jardines de Méndez Núñez o el de Belén Tajes y Eiris Mackenzie, en la plaza de España, mientras que el espectáculo ‘Bailes as Vellas’ sí se pudo celebrar, pero tuvo que trasladarse a los soportarles de la plaza de María Pita porque siguió lloviendo durante el resto del día, hasta superar los doce litros por metro cuadrado.
De esta manera vivieron los coruñeses el efecto del sistema de bajas presiones que anunciaba el parte meteorológico, aunque no llegó a recogerse granizo, como también se había pronosticado. En cuanto a rayos, los coruñeses vieron unos cuantos. La Agencia Española de Meteorología (Aemet) contabilizó en Galicia 1.742 a medida que la gota fría se aproximaba por el oeste pero solo dos cayeron en las inmediaciones de la ciudad, uno por la mañana y otro por la tarde. También descargaron 26 más en el océano, según Meteogalicia.
El mal tiempo continuará durante los próximos días, con cielos encapotados, pero la probabilidad de lluvia será mucho menor, a medida que la dana continúa su camino hacia el este y con ella se aleja la inestabilidad que caracterizó la jornada de hoy. Pasada la alerta naranja, el tiempo será simplemente desapacible. En cuanto a las temperaturas del lunes seguirán rondando los veinte grados de máxima, pero en los próximos días se registrará un suave descenso, con unas mínimas de diez grados mañana martes y una máxima de 19 grados hasta el miércoles.
En cuanto al viento, continuará soplando de forma moderada, con un componente nordeste. Esto, sin duda, contribuirá a esa sensación fresca que será la tónica dominante durante los próximos días.