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domingo | 5 mayo | 2024
Ni siquiera el paso de dos borrascas de forma prácticamente simultánea pudo ejercer de elemento disuasorio para que los amantes del deporte y el culto a la vida saludable mantuviesen sus hábitos durante los últimos días. Sin embargo, aquellos que habitualmente los ejercen en las inmediaciones de la playa de Oza deben ir prevenidos y descargados de casa. La falta de servicios públicos en la larga senda runner, ciclista y demás usos healthy se ha convertido en un incordio que solamente se alivia en verano, cuando la temporada de socorristas implica la vuelta del equipamiento completo.
Se suceden en la asociación vecinal de Oza-Gaiteira-Os Castros los casos de residentes que han tenido serias dificultades para aliviar la urgencia, ya sea durante el ejercicio o simplemente paseando en un área libre de coches, sin edificios y totalmente llana, tres factores favorables para la evasión puntual, pero también a desmano de cualquier núcleo de población en el que encontrar un establecimiento hostelero o similares. El presidente de los vecinos, Paulo Sexto, resume de manera tan directa como gráfica la reivindicación. “Lo normal es que, si vas a hacer deporte allí y te entra un apretón, tengas dónde acudir”, explica. “Llevamos un montón de tiempo solicitando algo así y no nos hacen caso; el problema es que ni siquiera nos han contestado”, añade.
Además del incordio y el mal trago que supone para los usuarios de la vía que recorre toda la playa de Oza, la situación acaba por repercutir negativamente en el entorno, debido a las exigencias de la Naturaleza. “El que va a correr tiene que ir de campo”, subraya Sexto, algo que no gusta ni un pelo a los propios protagonistas de una acción que en realidad es constitutiva de falta. “Las quejas que estamos recibiendo es que se ponga un servicio público durante todo el año son cada vez más; durante la temporada de verano sí lo hay, pero lo quitan”, remarca.
Temporada de socorristas
El periodo comprendido entre el 15 de junio y el 15 de septiembre se corresponde con la temporada de socorristas, en la que se dota a las playas de todos los servicios necesarios para una utilización masiva.
Algunas zonas de la ciudad sí mantienen durante todo el hecho los servicios públicos, especialmente en el centro. Una situación que Oza y sus vecinos esperan tenga solución inminente.
