El incremento de precios en la energía y combustible, entre otras variables, castiga cada vez más a la sociedad. Algunos sectores, como el de la construcción, tuvieron que detener su actividad en marzo debido al parón de transportistas y el desabastecimiento de materiales. Si bien esto ya no ocurre a día de hoy, el sobrecoste de los trabajos es cada vez mayor y ya se traduce en un 30% más de las cifras recogidas en los contratos iniciales de las obras en la ciudad.
El presidente de la Asociación Provincial de empresarios de la construcción de La Coruña (Apecco), Diego Vázquez, asegura que “el problema actual es el encaje económico de las obras, que no somos capaces de solventarlo”. Califica el Real decreto de “cortina de humo” y, si nada cambia, prevé “un problema muy serio a final de año porque estamos financiando nosotros las obras”. Con la necesidad urgente de reequilibrar los contratos, Vázquez explica que en el ámbito privado de la construcción “hay otra capacidad negociadora, pero las inversiones se ralentizan porque el coste de cualquier infraestructura y proyecto se eleva más de un 30% y puede hacer caer una inversión”.
Por lo contrario, en el ámbito público, “el problema es la ejecución de las obras, ya que trabajamos a pérdidas. En esta cuestión ya no solo entra en juego la construcción, pero aquí confluyen muchos productos que siguen una espiral alcista”.
El presidente de Apecco menciona en este sentido que, en la revisión de precios, “no se ha recogido el alza de las energía y supone un 30% más para nosotros”. A pesar de esta situación crítica para el sector, se ha decidido “seguir trabajando para no detener las dinámicas, pero tenemos que lograr el equilibrio de los contratos”.
En cuanto a la realidad actual de las obras en A Coruña, Diego Vázquez relata que “se han licitado todas las relacionadas con los fondos Next Generation. Hay un gran dinamismo este año en inversión pública. El ámbito privado también está funcionando, hay varias obras en marcha y está habiendo una carga de trabajo relevante”.
Otro sector afectado por el incremento de los precios es el pesquero. El presidente de la Lonja de A Coruña, Juan Carlos Corrás, califica de “incertidumbre” la actualidad y, tras las palabras de la ministra de Economía, Nadia Calviño, alertando de que los próximos trimestres “van a ser complejos”, teme que el otoño pueda venir acompañado de una crisis.
“Los barcos están intentando economizar los desplazamientos lo máximo posible, pero todo influye y la actividad no es la habitual”, dice, mientras recuerda que “la guerra continúa, los costes son altos, los ánimos de los pescadores no son buenos y se teme que la situación empeore”.