11º-16º
martes | 16 abril | 2024
La concesión de la Compañía de Tranvías finalizará su concesión en 2024, lo que significa que el Gobierno de Inés Rey debe tener listo el pliego de condiciones del contrato y licitarlo para el próximo año. Es un proceso largo y complejo, que no ha empezado siquiera, porque actualmente se esta redactando un estudio que indique si factible la gestión pública directa. Es poco probable que sea así, puesto que no se ha municipalizado ningún servicio en lo que va de mandato, pero este estudio forma parte del acuerdo de investidura al que el PSOE llegó con la Marea y el BNG.
Es más probable que la concesión acabe sin que el contrato se haya licitado, y acabe prestándose de forma irregular, como ya está ocurriendo con contratos muy importantes, como el de la planta de reciclaje de Nostián. El concejal de Movilidad, Francisco Díaz, se limitó a repetir que “trabajamos para llegar”, cuando se le preguntó por esta cuestión. Expertos consultados señalan que es “difícil, pero no imposible”. En todo caso, aunque el informe fuera favorable a una gestión directa, eso no significaría, ni mucho menos, que el transporte público pasaría al control directo del Ayuntamiento.
A este respecto, se cuenta con el precedente del centro deportivo de O Castrillón, que todavía no ha abierto sus puertas tras años de demora. A principios de este mandato, cuando el actual concejal de Turismo y Seguridad Ciudadana, Juan Ignacio Borrego era todavía concejal de Deportes, se redactó un informe en el que se aconsejaba su gestión pública. El informe señalaba que el pequeño tamaño del centro deportivo lo hacia poco atractivo para una empresa privada, que no le sacaría rentabilidad.
Sin embargo, el Ayuntamiento ha decidido solucionar el problema uniendo la gestión de estas instalaciones con las de San Diego, de mayor tamaño. El concejal de Hacienda y portavoz del Gobierno local, José Manuel Lage, señaló en agosto que aunque se abrirá bajo la gestión de la empresa municipal Emvsa, es solo una medida temporal para que pueda estar abierta antes de que acabe el año
Otro problema que está de actualidad es el de las bibliotecas municipales, algunas de las cuales tiene una gestión directa publica y otras de concesionaria. Los empleados de estos últimos protestan por los impagos de sus sueldos, y la oposición ya ha pedido medidas directas.
Pero lo cierto es que los gobiernos municipales anteriores tampoco han hecho grandes avances en la gestión directa de los servicios municipales. Ni siquiera la Marea Atlántica, que lo mantenía como unas claves de su ideario, llegó a hacer ningún avance en ese sentido aunque se defiendan señalando que se encontraban en un contexto diferente, marcado todavía por la crisis de 2008 y las medidas extraordinarias de contención del gasto público.
Además, recuperar un contrato vigente es un desafío legal, de manera que la forma más simple es esperar a que caduquen. Pero ni siquiera entonces el Ayuntamiento se decide a gestionarlas directamente, como es el caso de las concesiones de los aparcamientos, que siguen en el aire. Es Pese a todo, tanto el BNG como la Marea consideran que el Gobierno local no está cumpliendo sus compromisos.
