El artista internacional puertorriqueño Luis Fonsi volvió a triunfar ayer en A Coruña por segunda vez en está década con su actuación en el teatro de Santa Margarita, un concierto dentro del marco del festival Son do Nordés, que inaugura este año su primera edición. Con un repertorio que combinó temazos de reguetón como ’Despacito’ o baladas desgarradoras como la de ‘Imagíname’, Fonsi hizo que las miles de personas que se acercaron a verlo disfrutasen, una vez más, de su memorable presencia escénica.  

Con algunos minutos de retraso, por fin, comenzó el espectáculo ante un público que ya estaba ansioso por escuchar sus temas en directo.

“Boas noites”

Tras las primeras canciones, saludó en gallego con un “Boas noites” que enloqueció al respetable. “¿Lo dije bien? Llevo tres días practicando”, afirmó después, buscando la complicidad de sus fans, que respondieron con aplausos. 

Fonsi fue desempolvando su repertorio mientras interactuaba constantemente con un público cada vez más intenso. “Una mas romántica, ¿puedo seguir con una más romántica? Es que a mí me gustan las cortavenas”, preguntó el artista. “La buena música, que es romántica y nunca va a pasar de moda”, añadió después.

Uno de los momentos más especiales de la noche llegó cuando cantó ‘Roma’ (en su último álbum, todas las canciones tienen nombre de ciudad). Este tema es un dueto con Laura Pausini, “la mejor voz femenina del mundo” según un Fonsi que pidió al público que se encargase de cantar las estrofas de la italiana. 

La emoción seguía en aumento, y ‘Échame la culpa’ fue otra de las canciones que las 3.400 personas presentes se sabían de carrerilla. En ese punto, la comunión entre público y artista era ya plena.

Aún hubo tiempo para cantar otros clásicos como 'Imagíname sin ti'. Incluso consiguió que todos los presentes bailasen bachata al ritmo de sus pasos. Por último, llegó el tan esperado ‘Despacito’, que culminó una noche inolvidable.

En 2022, Fonsi ya había logrado enloquecer a las 30.000 personas que pasaron por María Pita, a las que no consiguió frenar ni la lluvia. Ayer, volvió a hacerlo en un escenario diferente, pero en el que su música volvió a hacer vibrar a los asistentes.