La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, se pronunció este viernes por primera vez sobre la dimisión del exconselleiro do Mar, Alfonso Villares, investigado por agresión sexual. Lo hizo tajante, mostrando su apoyo a la presunta víctima. "Creo que hay que ser muy valiente para presentar una denuncia por agresión sexual, por lo tanto mis primeras palabras son de apoyo a la presunta víctima, de apoyo a su entorno y de apoyo a todas las mujeres que tienen que sufrir una doble victimización cuando denuncian una agresión machista o sexual, que tienen que sufrir la culpabilización de la sociedad y que tienen que sufrir actitudes tan irresponsables e inexplicables como las del presidente de la Xunta y sus conselleiros".
Estos últimos, señaló, "se dedican a alabar esa supuesta valentía y generosidad de un señor que está investigado por una agresión sexual. Mis palabras no son ni para valorar la dimisión ni para valorar al conselleiro, son de apoyo total a la mujer que ha dado el paso de denunciar y a todas las mujeres que dan el paso de denunciar sabiendo que en esta sociedad, en la que existe todavía un machismo estructural, tienen que estar sometidas y ser cuestionadas cuando se denuncia una actuación y una agresión machista".
La regidora mencionó el "bochorno" que le produjo lo ocurrido este jueves en la toma de posesión de cargo de la nueva conselleira do Mar, Marta Villaverde, a la que asistió Villares, quien se abrazó públicamente con el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda. "Quiero destacar el bochorno que me han producido las manifestaciones públicas de los conselleiros, los aplausos a un señor que se marcha de la política no como un héroe, sino que se marcha porque está siendo, repito, investigado por una agresión sexual".
La alcaldesa de A Coruña lamentó de nuevo la situación de la presunta víctima. "Se ha llegado a cuestionar su estabilidad mental, su vida privada, se pone siempre el foco en la víctima y jamás en el agresor y en quienes blanquean, protegen y alaban a los agresores. Ya está bien. Las mujeres estamos hartas de que se nos esté juzgando siempre doblemente: por lo que hacemos y por el hecho de ser mujeres. Todo mi apoyo a esta mujer que no tiene que verse sometida a un juicio público, a un escrutinio de su vida privada, a estar permanentemente en boca de todo el mundo cuando probablemente lo ha tenido que pasar muy mal cuando ha tenido que ir a denunciar, lo está pasando mal y las personas que la quieren y la rodean lo estará pasando muy mal. Y de este señor se despiden de él entre aplausos, entre abrazos y con alabanzas a una supuesta valentía. ¿Valentía de qué? Es una vergüenza que desde febrero supieran que este señor fue a declarar por una denuncia por agresión sexual y no hicieron absolutamente nada. Es vergonzoso".
Lo ocurrido este jueves en la toma de posesión de Villaverde pone de manifiesto, según Inés Rey, "el mensaje que se les lanza a las mujeres que son víctimas, que es el de 'oiga, mire, mejor no denuncie porque al agresor lo vamos a llevar en palmitas, le vamos a aplaudir y va a ser un héroe, y a usted la vamos a someter a un escrutinio de si lleva la falda más larga o más corta, de si está divorciada o casada o de cuántas relaciones ha tenido'. Es un asco lo que estamos viviendo en esta sociedad".
Esta "culpabilización de la sociedad" se da, dice, "porque es un conselleiro y es una señora famosa -se ha dado a conocer que la denunciante es la presentadora y modelo Paloma Lago-, pero, ¿cuántas mujeres hay anónimas que no se atreven a denunciar o están sometidas en su entorno laboral o familiar a esta presión y a esta violencia machista constante? Es asqueroso. Este señor tenía que haber dimitido el primer día, y si no lo hacía, lo tenía que haber dimitido quienes supieron y consintieron que siguiese ejerciendo un cargo público. Espero que den las oportundas explicaciones todos y ya veremos el resultado de las diligencias judiciales", concluyó.