La recta final de las obras del túnel de Os Castros se vislumbraba hace 25 años con la apertura al tráfico de uno de los carriles de esa nueva construcción, una de las más importantes de acceso a la ciudad. Ese paso al frente para la entrada en funcionamiento de la vía fue uno de los asuntos destacados por El Ideal Gallego el 10 de junio del año 2000, una edición en la que también informó de la incautación en Tui del que entonces era el mayor alijo de heroína de la historia de Galicia. Hace 50 años, tal día como hoy de 1975, el diario se hacía eco del paro de protesta realizado por los pesqueros coruñeses de la flota de arrastre. También marítima era la actualidad de hace 75 años, en aquella ocasión por el rescate con vida de los trece náufragos del ‘Marilena’.
Las obras de los accesos a A Coruña tienen desde ayer, 9 de junio del año 2000, un capítulo menos para los vecinos de Os Castros y los conductores que utilizan esta vía de entrada a la ciudad, ya que se ha abierto al tráfico un carril provisional que circulará por el interior del falso túnel. Los vehículos que bajan por la calle Vales Villamarín hacia el centro de la ciudad a través de la avenida del Ejército serán desviados por esta vía, que ha sido asfaltada y que fue abierta ayer al tráfico por primera vez. La intención de este carril provisional es la de eliminar el tránsito de vehículos en el entorno de la glorieta del Mirador de Os Castros, a donde se trasladarán de inmediato las obras. Los trabajos se centrarán ahora en demoler la actual glorieta para comenzar a unir los dos tramos ya construidos del falso túnel.
Por otra parte, agentes de la Policía se incautaron ayer del mayor alijo de heroína de la historia en Galicia. La operación, bautizada como Manjar, se desarrolló en Tui y permitió la detención de cuatro hombres y una mujer, dos de ellos portugueses y el resto españoles. Los 24 kilos de droga, de gran pureza, habían sido trasladados desde Turquía y se encontraban ocultos en barricas de vino. Su valor en el mercado ascendería, según fuentes de la investigación, a 1.400 millones de pesetas.
Los pesqueros coruñeses que forman la flota de arrastre no habían salido al mar, en la madrugada del domingo 8 al lunes 9 de junio de 1975, en protesta por la actuación de la lancha patrullera de vigilancia y en la misma actitud continuaban a las nueve de la noche de ayer lunes, toda vez que a dicha hora no habían variado las circunstancias que motivaron el paro. El motivo de la queja estriba en que se exige virar a los pesqueros durante las faenas de pleno arrastre. Se ordena, asimismo, arrojar al mar los peces capturados en esa circunstancia.
Además, con una jornada completa de fútbol en la que se disputaron tres partidos –con actuación de equipos de viejas glorias, veteranos y clubes modestos– fue despedido el domingo el campo de La Granja, que durante treinta y un años fue cantera de grandes futbolistas.
A las nueve y media de la mañana de ayer, 9 de junio de 1950, y a la altura de las islas Sisargas, la embarcación de pesca denominada ‘Marilena’, con base en el puerto de La Coruña, se fue a pique a consecuencia de una gran vía de agua que se abrió de repente debajo de la caldera.
El barco comenzó a hundirse, acudiendo en su auxilio el pesquero ‘Felisa Domínguez’, que no pudo acercarse al primero a consecuencia del fuerte oleaje que había. Los trece tripulantes del ‘Marilena’ se lanzaron al agua, siendo recogidos por los marineros del ‘Felisa Domínguez’, que los condujo al puerto coruñés a última hora de la mañana de ayer.
Los propietarios de la embarcación siniestrada son don Enrique Vales y doña Ángeles Jiménez, y el patrón de la misma don Ramón Rego Rial, de 60 años, vecino de La Coruña.