La Guardia Civil alerta de que crece el furtivismo en A Coruña y Oleiros

La Guardia Civil alerta de que crece el furtivismo en A Coruña y Oleiros
Capturas ilegales de moluscos y crustáceos aprehendidos por la Guardia Civil

En las últimas semanas, con la legada del buen tiempo y del turismo se ha registrado una demanda de marisco que se ha traducido en un incremento del furtivismo en la costa coruñesa. Es por eso que el Eprona (Equipo de Protección de la Naturaleza) de A Coruña, en colaboración con Unidades de Seguridad Ciudadana de la Guardia Civil de la provincia, ha llevado a cabo una operación que se ha saldado con el arresto de una banda de furtivos que actuaban en A Coruña y Oleiros, así como en Boiro.


Son siete sujetos que están acusados de un delito contra la flora y fauna. La operación se inició al detectar un incremento del furtivismo en la ría de O Burgo y otros lugares de Oleiros y A Coruña. Según el Instituo Armado, no se puede afirmar que los furtivos formaran una organización criminal, pero las investigaciones revelaron que si se coordinaban entre ellos para concretar zonas a mariscar ilegalmente, así como fechas y horas más propias para efectuarlo.

 

Los investigados tenían una vinculación entre sí para  concretar zonas a mariscar ilegalmente

 


Todos los detenidos son reincidentes y se calcula que habían extraído de las rocas en los últimos años aproximadamente unos 900 kilos de moluscos y crustáceos sumando todas las capturas ilegales que había realizado y de las que tienen constancia las autoridades porque dieron lugar a las correspondientes infracciones administrativas.


Las Consellería do Mar había abierto expedientes sancionadores contra ellos y resuelto los mismos con la imposición de sanciones pecuniarias que en suma superan 1.1175.000 euros.

 


Investigaciones


La Guardia Civil continúa con las investigaciones para el total esclarecimiento de los hechos, no descartándose más investigados en las próximas fechas. Desde el Instituto Armado recuerdan que el furtivismo, actividad que afecta tanto a los recursos naturales como a la salud pública de los consumidores, al poner a disposición del ciudadano productos que no tienen la trazabilidad que garantiza un consumo seguro, pero en A Coruña lleva años siendo una fuente de ingresos en poblados como el de O Portiño o, anteriormente, el de la Conservera Celta, en A Pasaxe.


Una prueba de ello es que la Policía Local se incautó de varios kilos de percebes que descubrió en manos de unos furtivos en la avenida de Buenos Aires, en Riazor. Al parecer, iban vendiéndolos de puerta en puerta en los restaurantes de esa calle. Es una práctica habitual entre los furtivos, que siempre encuentran entre los hosteleros a algunos que no respetan la normativa. 

La Guardia Civil alerta de que crece el furtivismo en A Coruña y Oleiros

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