Tras el apagón internacional sufrido ayer, muchas eran las familias que no tuvieron la posibilidad de enterarse o reorganizar la jornada en base a la comunicación oficial de que los centros educativos no iban a realizar ningún tipo de actividad lectiva durante el día de hoy.

No obstante, esta mañana la Xunta de Galicia ha enviado una comunicación a los equipos directivos de los centros de la comunidad en la que se ratifica que, siguiendo instrucciones recibidas por el Gobierno central en el nivel 3 de emergencia, estos deberán permanecer abiertos.

Así, muchos de los colegio de Educación Infantil, Primaria o Secundaria comunicaron su apertura desde primera hora para atender cualquier tipo de incidencia y que "o alumnado poida acudir naqueles casoss no que o precise por razóns de conciliación ou similares", según ha concretado hace unas horas la Consellería de Educación.

Sin embargo, esta mañana -a pesar de la vuelta del suministro eléctrico a la urbe- la incertidumbre se volvió a apiadar de las familias que, tras despertar, aún no tenían claro qué hacer con sus hijos. Es el caso de Donalbai García, madre de un alumno de Primaria en el CEIP Eusebio da Guarda. "Hoy por la mañana nos mandaron un mensaje por el grupo de que se suspendía la actividad lectiva, pero que el colegio iba a estar abierto", comenta. 

En realidad lo que pasó fue que, a primera hora de la mañana, uno de los padres mandó una foto de un cartel pegado en la puerta del colegio en el que exponía que el colegio sí estaba abierto. "Gracias a la foto nos enteramos de que podíamos llevar al niño si lo necesitábamos", expone, aunque de momento "no sabemos si finalmente hay comedor o no".

Así, tanto colegio como instituto Eusebio da Guarda se encuentran acogiendo alumnos, aunque en el caso del centro de Secundaria, ahora mismo no se encuentran más de quince personas. Prácticamente la misma siuación viven en el colegio Calasanz, donde no hay alumnos de Secundaria pero sí algunos de Primaria y, sobre todo, Infantil. En este caso, desde primera hora de la mañana los familiares se enteraron de que se supendía tanto el transporte escolar como las actividades extraescolares y, aemás, el comedor.

Compañía de María, Emilia Pardo Bazán, Labaca y Cristo Rey son otros de los colegios de la ciudad y su área que desde primera hora de la mañana atendieron a niños que, por situación de conciliación de los padres, no pudieron reorganizar la mañana de otra forma posible.