Los trabajos de humanización de la calle colindante a la plaza de la Tolerancia dieron inicio este miércoles con la tala de ocho árboles que serán sustituidos por otros quince ejemplares. La intervención en la zona es una demanda vecinal con la que el Gobierno local integrará paisajísticamente este recorrido con el parque y el área infantil.
El BNG de A Coruña registró la pasada semana varias preguntas por escrito sobre esta actuación, advirtiendo de la tala de ocho árboles de gran porte en la calle de Marcela y Elisa. Efectivamente, las obras que comenzaron esta mañana suponen la retirada de los ejemplares, ocho chopos plantados hace años, pero el Ayuntamiento aclara que se debe a cuestiones de seguridad.
"Los chopos son árboles de madera blanda y crecimiento rápido. En este caso, al cambiar la acera, tienen un riesgo de caída. En A Coruña no se quita ningún árbol por quitarlo, se hace porque pueden suponer un riesgo para las personas", señalan fuentes municipales. Tras su retirada, además, se plantarán otros quince árboles. En este caso serán cedros, de hoja perenne y buen porte, y prunus cerasifera, ciruelo de hojas púrpura, de floración rosa y hoja caduca.
Las obras de humanización, que supondrán una inversión de 90.000 euros, consistirán en la creación de una plataforma única entre las calles Almirante Romay y Argentina y mejorarán el tránsito peatonal entre la plaza de la Tolerancia y los edificios con acceso a la calle homónima, uno de los compromisos asumidos por el Gobierno de Inés Rey al amparo del plan de mejoras previsto en el distrito.
Los trabajos comenzarán, previsiblemente, con las mejoras previstas en las infraestructuras municipales, que incluyen la reposición de un colector, por lo que nos días previos ya se pintará y se señalizarán los servicios sobre el pavimento.
La intervención, que fue aprobada a través de los Presupuestos Participativos, cuenta con un plazo de ejecución de unos cuatro meses, siempre y cuando las condiciones meteorológicas sean favorables para el desarrollo de las obras.