El Deportivo aguanta, mantiene el pulso con el Eibar en las posiciones nobles de la tabla y pone más distancia con la tercera plaza después del traspié del Recreativo en Lugo.

El equipo coruñés salió a incomodar, atosigar y presionar a un rival ya de por sí en momento incierto. Combinando bien se plantó cerca del área rival y jugó en su campo. Los maños aprovecharon una contra en el minuto 7 para dejar claro que también tenían sus argumentos. Roger, de cabeza, remataba fuera con media portería para él, un balón servido desde la derecha. Respondía Insua con una acción en la que, también de testa, mandaba la pelota sobre la meta de Leo Franco. Superado el cuarto de hora se equilibraban las acciones, pero el Depor jugaba mejor. A los 20 minutos Luis Fernández era derribado en el área en un penalti que el colegiado no señalaba, quizá porque antes había habido una mano del canterano que tampoco había indicado.
El Zaragoza disponía de sus mejores momentos en la primera parte a partir de entonces. En el 23 Lux tenía que enviar a córner un balón envenenado que no conseguía atajar. En el 26, en una contra clara, Roger se quedaba solo ante el arquero, que respondía con un paradón de balonmano en el corazón del área. Los maños despertaban y metían en apuros al Depor, pero los herculinos seguían combinando bien por momentos.
En el 29 Laure se iba por su banda, entraba en el área, hacía la pared con Juan Domínguez y chutaba tan ajustado que la pelota daba en el palo, en la espalda de Leo Franco y entraba en la meta para establecer el 0-1. Aunque en la finalización pueda influir el factor suerte fue una acción de enorme mérito del lateral y capitán blanquiazul.
El Zaragoza contestó con un centro a Roger que Lux interceptaba de puños y un remate forzado de Luis García. Fernando Vázquez gritaba a los suyos desde la banda, pedía más fortaleza para no verse sorprendidos. En la siguiente, en el 35, un pase de Seoane dejaba a Luis Fernández solo ante el meta local, pero controlaba mal la pelota en una opción clarísima para anotar el segundo antes del descanso, al que se llegó con la ventaja coruñesa.
Víctor Muñoz hizo sus cambios en el vestuario y salió a la reanudación con Suárez y Barkero, buscando la velocidad del primero y la calidad del segundo a la hora de hacer pases o lanzamientos de falta. Vázquez tardó poco en equilibrar las fuerzas y lo hizo con un cambio, dando entrada a Wilk. Retrasó su posición Álex Bergantiños y el Depor jugó con tres centrales.
Aunque la sensación que dio el equipo fue de meterse en la cueva de manera prematura lo cierto es que domó a la fiera maña y todos los balones al área fueron ganados por los blanquiazules. Después de un remate de cabeza de Suárez y de un centro peligroso que atajaba Lux, la entrada de Wilk cambiaba el dibujo y el Deportivo pasaba a convertirse en un frontón.
El partido se trabó, las faltas se hicieron más persistentes y el fútbol desapareció por momentos. El equipo herculino se sintió cómodo y pasó de construir en el primer periodo a destruir, en el segundo, buscando las contras para sentenciar.
Vázquez dio entrada a Ifrán para el descanso de Luis Fernández, con un gran trabajo contra los defensas aragoneses, y retiró a Sissoko, uno de los destacados, para que Núñez refrescase la banda. El Zaragoza atacó de manera desordenada y deslavazada, todo lo contrario que la férrea defensa coruñesa. En el 77 Suárez probó suerte desde la frontal, en el 80 la pelota se perdía buscando a Luis García entre los silbidos de una hastiada afición local. El Depor aguantó los envites zaragocistas con bastante comodidad y esperó pacientemente al final de la contienda. Una final menos, una victoria más. Ahora, a pensar en el Tenerife.

1. con cuatro en defensa para marcar el 0-1
El equipo coruñés combinó, jugó, y generó fútbol hasta que consiguió el 0-1. A partir de ahí intentó dominar al rival para no darle ninguna oportunidad de que consiguiera el empate.

2. víctor hace dos cambios en el descanso
El técnico maño hizo dos cambios dentro del vestuario para no dar pistas e intentó cambiar la dinámica de los suyos con velocidad y más control.

3. el deportivo cierra el encuentro
Una vez que el entrenador local hizo sus variaciones le tocó a Fernando Vázquez, quien puso en liza el sistema de tres centrales y ahogó al Zaragoza.