“Muchos marineros han muerto por no llevar el equipo adecuado”

Con más de 35 años de trabajo asesorando a intrépidos navegantes, este \“lobo de mar\” canario ha relatado sus numerosas experiencias en la jornada de puertas abiertas que la Escuela de Náutica organizó ayer con motivo de la festividad de San Telmo, patrón del centro.

—Usted es el fundador de la Rueda de los Navegantes. ¿De qué se trata?

—Es una organización que se dedica a asesorar a los navegantes veteranos y novatos en sus periplos por oceánicos. Les ayudamos a nivel personal (en caso de enfermedad), en cuestiones técnicas si tienen poca experiencia y, más que nada, damos información meteorológica. Contactamos todas las noches con las personas que tenemos en el registro de la Rueda, desde que salen de la Península hasta llegan a su destino.

—¿Atienden a muchos navegantes en la actualidad?

—Con la crisis, la cosa está floja, y hay poca demanda, porque la gente está vendiendo sus barcos, ya que no puede mantenerlos. A este respecto, me gustaría desmentir la creencia general de que todo aquel que tiene un barco de recreo es millonario. Hay mucha gente que con mucho sacrificio quiere dedicar su tiempo libre a navegar, porque le gusta el mar.

—Los medios con los que cuentan los navegación deportiva son muy avanzados, pero, ¿hay algún reto pendiente?

—Por supuesto, sobre todo en lo que se refiere a seguridad. Hemos tenido muchos casos de gente que se ha hundido por no tener los equipos adecuados. Por eso es muy importante la formación antes de embarcarse, tanto a nivel de conocimientos de navegación como de elementos de seguridad.

—En La Rueda trabajan a menudo con Salvamento Marítimo. ¿Cómo valora su labor?

—Tengo que decir que el Salvamento Marítimo español es una de las instituciones mejor preparadas a nivel internacional. Y no es un piropo gratuito, porque han demostrado su profesionalidad en muchas ocasiones. Y su labor formativa es extraordinaria, ya que siempre están dando charlas y cursos en todas las escuelas y clubes náuticos del país. Una cosa muy meritoria, porque la gente en España es poco disciplinada a la hora de acatar órdenes.

—¿Cómo ve la situación de la titulación de Náutica?

—Tengo que destacar que me he llevado una sorpresa por el elevado número de alumnos que hay en la escuela coruñesa, casi 500. Ahora mismo, hay una cierta crisis de barcos en España, pero creo que los estudiantes de náutica están tan bien preparados que pueden encontrar otras alternativas profesionales dentro del sector.