ÓPTICA

Por mor de un accidente casero, un cristal de mis gafas saltó de la montura y esperando ante la óptica su apertura para el remontaje del cristal, un anuncio captó mi atención. 
Un rebaño de ovejas con gafas de sol oscuras, menos una, que las llevaba con montura roja y cristales amarillos. Un mensaje subliminal clarísimo: “Sé diferente”. 
En eso del rebaño ocurre como con las opiniones: cada cual tiene la suya. Su óptica sobre un asunto podrá compartirla con la de la mayoría; pero eso no quiere decir que quien lo vea de otra manera no tenga razón desde la suya propia. 
Ya saben: todo es según el color del cristal con que se mira. Por eso me importa un pijo lo que me digan, impongan, o traten de imponer, desde la mayoría del Gobierno. Del que sea.  Si no se adecua a mi óptica, no la respeto. Tendré que enfrentarme y soportarla, más o menos. Pero si alguien me señalara con su dedo por ello, yo también tengo otro.

ÓPTICA

Te puede interesar