No me refiero al trío sudamericano, sino a uno de aquí, a saber: César Alierta, presidente de Telefónica; Antonio Brufau, que lo es de Repsol; y José Gorigolzarri, el Chachi de Bankia.
Y es que este trío, con unos sueldos y unas jubilaciones de carallo (Alierta: 10,2 millones en 2011, entre sueldo, acciones y aportaciones a su plan de pensiones, y ahora 35,5millones más, a cambio del blindaje de su contrato. Brufau con un sueldo de 4,5 millones al año, y contrato blindado con 18 millones; y el Chachi, jubilado en el BBVA con 53 millones), en una charla-coloquio-carallada, aparte largar de lo suyo, dijeron: “No podemos tener miedo. O, no tenemos miedo a Podemos. Que el bipartidismo es cojonudo” (lo será para ellos), y que “urgen a España a mejorar el tema educativo”.
Todo lo que sea mejorar es bueno. Debieron decir que podían subirnos las pensiones de jubilación, y quedarse tan panchos.