Un niño de cuatro años murió ahogado en la piscina de un colegio de verano privado de Campolivar en Godella (Valencia), informaron ayer fuentes de los servicios de Urgencias y de la Policía Local.
El suceso se produjo el lunes sobre las 12.30 horas, y una ambulancia, que recibió el aviso sobre las 12.50 horas, se trasladó hasta el lugar. Antes de la llegada del equipo médico, agentes de la Policía Local y un facultativo de la localidad intentaron reanimar al pequeño, pero al introducirlo en la ambulancia para estabilizarlo el niño entró en parada cardiorrespiratoria, aseguraron las fuentes.
El pequeño fue trasladado aún con vida hasta el hospital La Fe de Valencia, donde falleció al poco tiempo de ingresar.
Las fuentes policiales han señalado que el juzgado que se ha hecho cargo del caso ha decretado el secreto de sumario.
Por su parte, fuentes del centro informaron de que la piscina  estaba vigilada por dos monitores que practicaron los primeros auxilios al menor. La dirección de la escuela expresó su “consternación” por el “accidente” que sufrió el menor, cuyas causas están siendo investigadas.
Los monitores le practicaron los primeros auxilios mientras se alertaba al teléfono 112 de Emergencias y “en cuestión de minutos” se personaron en el lugar agentes de la Policía Local de Moncada y del Servicio de Atención Médica Urgente.
Desde el inicio de las vacaciones de julio el pasado viernes, tres niños se ahogaron en las piscinas españolas en tres accidentes ocurridos en las últimas 48 horas.
A los niños que se ahogaron ayer en Valencia y Córdoba se suma un niño de 4 años que falleció ayer en Campolivar en Godella (Valencia) y un pequeño de 8 años que perdió la vida el pasado domingo en la localidad jiennense de Cabra de Santo Cristo.
Estas muertes hay que añadirles la de un niño de 7 años que falleció el 14 de junio cuando jugaba con otros menores de edad a darse ahogadillas en una piscina de una comunidad de vecinos de un barrio de  Zaragoza.
Además de los accidentes ocurridos en piscinas en las últimas fechas, dos hermanos fallecieron el pasado 4 de junio en el río Miño a su paso por la localidad pontevedresa de Salvaterra.
El suceso se produjo cuando los dos hermanos y un amigo, transitaban por el paseo fluvial y uno de ellos cayó al río y otro se tiró al agua para auxiliarlo. Pese a que el hermano menor fue rescatado por los vecinos, los equipos sanitarios no pudieron evitar el fallecimiento del niño. n