La Autoridad Portuaria carece de competencia sobre los locales de hostelería de O Parrote –que continuarán vacíos tras la renuncia de los responsables del restaurante Silabario y del pub Dux a abrir sus negocios en este emplazamiento– ya que la gestión de este espacio corresponde a la empresa Copasa.
Fuentes del organismo portuario confirman que ellos no tienen responsabilidad alguna sobre la renuncia a la apertura de estos locales de hostelería ya que es la empresa dedicada a la construcción y a los servicios la dueña de la concesión para realizar su explotación.
En este sentido, desde la Autoridad Portuaria explican que es Copasa quien “decide” quién se instala en este espacio, aunque les consta que está intentando “comercializarlo” para que no siga vacío, algo que esperan desde este ente. “Este lugar tiene usos definidos y terciarios”, añaden.
los arcos
Diferente es la situación respecto a los arcos, que actualmente se encuentran “pendientes de desarrollo” según indican desde la Autoridad Portuaria. En uno de ellos se iba a ubicar el restaurante Baluarte.
Estas arcadas ya fueron adjudicados hace tiempo, aseguran las mismas fuentes, aunque el proceso para la instalación de los negocios en estos espacios se alargó, entre otras circunstancias, “porque tuvieron que pasar por Patrimonio de la Xunta y por el Ayuntamiento”.
Las adjudicaciones para la explotación de estos arcos fueron concedidas a empresas “del sector de la hostelería y a alguna de carácter cultural”, aseguran desde la Autoridad Portuaria, que desconoce cuándo entrarán en funcionamiento estos negocios.
Mientras tanto, O Parrote, reservada solo para los peatones continúa a la espera de contar con establecimientos que ayuden a consolidar esta zona como una de las principales alternativas de ocio de la ciudad y a su vez generar empleo. n