El Ayuntamiento de Culleredo está llevando a cabo una las principales actuaciones en materia educativa: la cubrición del patio del colegio de Tarrío.
Según fuentes municipales, fue una de las sugerencias realizadas por los padres y el Gobierno local decidió programarla a cargo de fondos propios, aún a pesar de que la competencia educativa reside en la Xunta, dado el “interés prioritario” que tiene la educación para el Ayuntamiento.
El equipo de gobierno, que preside Julio Sacristán, aprovecha el parón de las clases por las vacaciones de Navidad para llevar a cabo la actuación, que consiste principalmente en la instalación de una cubierta principal, sobre la pista deportiva, con una estructura de madera laminada. También se incluye la instalación de una estructura de tipo metálico para proteger a los usuarios desde el acceso por las escaleras a la pista.
Los pilares sobre los que se erguirá la cubierta ya han sido instalados en el borde de la pista. Ahora se procederá a levantar la cubierta de madera, que ya está físicamente en el recinto escolar. Para el traslado de los pilares y la estructura, dada su gran envergadura, fue necesario realizar diversos cortes de tráfico en la zona.
Los trabajos suponen una inversión municipal de 147.015 euros, procedentes del remanente positivo de tesorería. Con la cubierta se logrará que los escolares dispongan de un espacio protegido para el recreo o la práctica deportiva, complementando al polideportivo, sin depender como hasta ahora de la situación meteorológica.
superávit
El Ayuntamiento indica que invertirá 614.000 euros del superávit en centros de enseñanza. Al proyecto ya mencionado en Tarrío habrá que sumar la instalación de cubiertas en los patios de los CEIP Sofía Casanova, en Vilaboa y Ría do Burgo, en Fonteculler.
En el caso del colegio de Vilaboa, el objetivo de la actuación consistirá en cubrir el patio infantil para proteger a los pequeños de las inclemencias meteorológicas.
Así se garantizará que puedan usar los juegos con independencia de la lluvia. La cubierta proyectada tendrá una estructura de madera laminada y tratada, dado que se encuentra a la intemperie y cerca del mar.
El techo, a un agua, tendrá material translúcido para preservar la entrada de luz a las aulas de la planta baja.
No será la única obra que se lleve a cabo en el Sofía Casanova ya que está previsto renovar también la pista deportiva, que use tanto para actividades docentes como de recreo vecinal.