Lo que comenzó como una broma para generar “rivalidad sa” entre el Deportivo y el Celta, ha acabado con la dimisión del concejal de Deportes, Brais Cubeiro, y un sinfín de críticas desde diversos sectores sociales. El edil manifiesta que no tenía conocimiento de la nota de prensa que bromeaba con el Celta y asegura que se envió en su nombre sin su consentimiento, por lo que ha decidido presentar su dimisión.
Cubeiro apunta que no está en política “para facer bromas nin faltar o respecto a ninguén”. “Calquera que me coñeza sabe que esa non é a miña forma de actuar”, indica el concejal, quien notificó ayer su renuncia como responsable de Deportes y como concejal del BNG en la corporación cambresa, pidiendo disculpas al Celta, al Ayuntamiento de Vigo “e a todas aquelas persoas que se puideron ver afectadas”.
A Balastreira, celtista
La concejalía de Deportes lanzaba ayer un irónico comunicado para ofrecer el campo de A Balastreira, en Cecebre, al Celta de Vigo, club que manifestó hace unos días su intención de abandonar la ciudad olívica y asentarse en otra ubicación. En la nota, firmada por Brais Cubeiro, se indicaba al equipo de Vigo que la finca de Cecebre tenía unas condiciones “óptimas”, con buenas comunicaciones –tren y autopista–, variada oferta gastronómica y hasta “un pequeno galpón de dous metros cadrados onde habería espazo de sobra para acoller as vitrinas do Celtiña”. Para finalizar, dejando claro que se trataba de un chiste inocente, añadían que los celtistas “sempre serán moi ben acollidos se teñen a ben vir a Cambre, dende onde se desexa, xa sen retranca, que solucionen os seus problemas do mellor xeito posíbel”.
El autor del comunicado fue el concejal de Cultura, Dani Carballada, quien pidió disculpas públicamente y reconoció como “un erro” enviar el texto en nombre del Ayuntamiento de Cambre y de su compañero Cubeiro. Por su parte, el alcalde, Óscar García, se puso en contacto con el presidente del Celta y con el regidor vigués, Abel Caballero, para aclarar la situación y pedir perdón. l