Más de quince mil personas visitaron este fin de semana la estación de montaña de Manzaneda para disfrutar de la nieve con la caída de las primeras nevadas, una cifra récord para las instalaciones del complejo invernal gallego, que se vieron por momentos desbordadas.
La dirección de la estación de montaña Oca Nova Manzaneda estima que 15.000 personas pasaron por el complejo invernal gallego y esto se suma a una media de 4.000 a 5.000 forfaits contratados.
En su gran mayoría los visitantes llegaron procedentes de las cuatro provincias gallegas y del norte de Portugal.
El director de la estación, Gustavo Samartín, valoró  satisfactoriamente esta “acogida récord” en las instalaciones que provocó por momentos algún problema para aparcar los vehículos y colas kilométricas que llegaron a superar los cinco kilómetros.
Por este motivo, Samartín ha agradecido “la compresión” de todos los asistentes a la estación este fin de semana, conscientes del “aluvión de gente” que hubo, un hecho que generó “retrasos y atascos” en la carretera de subida al complejo, además de colas para alquilar los equipos.
Las cifras evidencian que mucha gente se acercó “a disfrutar de la nieve” aprovechando unas “condiciones espectaculares”.
Actualmente, la estación gallega cuenta con entre “15 y 50 centímetros de nieve”, lo que está favoreciendo la práctica del esquí.
Por otra parte, el municipio de Calvos de Randín, en Ourense, registro esta noche la temperatura más baja de la comunidad, con siete grados bajo cero, según informó Meteogalicia.
Pese a estos registros, esta localidad, situada entre los 900 y 1.100 metros de altitud, llegó a rozar luego cada mediodía los 17 grados, una estampa curiosa que se viene repitiendo en las últimas jornadas y que los expertos atribuyen a la peculiar orografía de la zona.
Calvos de Randín, fronterizo con Portugal, había registrado ya la temperatura más baja del Año Nuevo en Galicia, con 7.1 grados bajo cero.