Junto a este incremento de la tarifa, a partir de enero, los usuarios con potencias contratadas entre 3 y 10 kilovatios -salvo los acogidos al bono social- que sobrepasen en más de un 10 % determinados consumos medios sufrirán recargos que podrían encarecer su recibo entre el 1 y el 8 %.
El coste de la energía supone alrededor de la mitad de la TUR, a la que están acogidos 17 millones de hogares y pymes, mientras que la otra mitad corresponde a los peajes de acceso, con los que se pagan costes regulados como el transporte, la distribución, las ayudas al carbón o las primas a las renovables.