Los promotores privados del Ofimático podrían recurrir a la justicia por las irregularidades

Los técnicos de la Asociación Parque Ofimático 2010, que agrupa a los promotores privados con propiedades en el polígono residencial, están estudiando el proyecto de urbanización del ámbito, tal y como señaló el concejal de Regeneración Urbana y Derecho a la Vivienda, Xiao Varela, este lunes. Sin embargo, las posiciones están lejos de acercarse aunque el representante municipal aseguraba haber conseguido un consenso entre todas las partes implicadas en el desarrollo del barrio. Fuentes de la agrupación de empresarios advirtieron ayer de que no descartan acudir a la vía judicial porque el Ayuntamiento no está avanzando en el proceso de reparcelación necesario para acometer la urbanización, que se soliciten nuevas licencias y que exista una seguridad jurídica para todos. 

En paralelo al estudio del plan de urbanización contratado por el Gobierno municipal para el entorno –y con ciertas dudas tras un primer vistazo–, desde la Asociación Parque Ofimático 2010 se mostraron ayer “muy preocupados” por la actitud de la Marea y su incumplimiento de los protocolos necesarios para que el polígono residencial sea una realidad de una vez por todas. “El Ayuntamiento está impidiendo la normalización del Parque Ofimático”, recalcan, y si no se les dan soluciones estudiarán “volver a los tribunales” como ya lo hicieron varios años atrás. 

Una especie de jerarquía
El descontento viene porque el protocolo firmado en verano de 2016 incluía la reparcelación del ámbito, que está pendiente desde la última modificación del plan parcial de diciembre de 2014. Mientras que sí se ha redactado, aunque más tarde de lo esperado, la iniciativa para urbanizar toda la zona, sigue “sin avanzarse” en los cambios urbanísticos. 

Pero afrontar la reparcelación de los terrenos de acuerdo con el plan parcial es fundamental para seguir la jerarquía de tramitaciones. El proyecto de urbanización recoge la obra física de las calles, el cableado y demás, pero el plan parcial es el que indica por dónde van las calles y la adaptación de las fincas es el paso intermedio antes de iniciar las actuaciones, para dar garantías legales al espacio. Desde la plataforma comentan que en su momento dieron una opción rápida de variación al Gobierno local que daría “absoluta seguridad jurídica y permitiría a las empresas empezar a construir” pero el no llegar a un acuerdo supone “uno de los principales escollos” ahora. 

“Solo hay en marcha edificios de cooperativas y de la Xunta y es muy sintomático que ninguna empresa privada esté pidiendo licencia allí”, insisten, lamentando que tras tantos años de espera “la situación no esté encauzada”. 

Desde el punto de vista de la agrupación no está claro “por qué no hay interés” en avanzar en el cambio urbanístico y se han perdido ya “dos años y medio” impidiendo “el desarrollo y normalización del ámbito”. 

Sin atención
Los promotores lamentan que la Marea solo esté dando prioridad a “beneficiar a los cooperativistas y en absoluto a las empresas” privadas, que tienen abierta la posibilidad de recurrir “a la contienda judicial” por la parálisis que les están imponiendo. 

Es la solución que ven porque la reparcelación afectaría a espacios de diversos propietarios y estos no pueden demandar permisos de obra, mientras que aquellos que sí pueden porque no se verían afectados por los cambios entienden que no deben por la inseguridad existente, incluso para los cooperativistas. “La sensación que tenemos es que no se nos ha hecho ni caso”, afean. l