O Castrillón no solo vivió un fin de semana pasado por agua. Los vecinos de este barrio coruñés denunciaron constantes cortes de luz, provocados por los saltos del diferencial, durante las dos jornadas. Las incidencias se concentraron sobre todo en el sábado, cuando los residentes de la zona contabilizaron hasta cincuenta cortes de suministro lumínico. “Llevamos una hora sin poder levantar la luz en casa”, explicaba un vecino del área afectado por este problema.
La Asociación de Vecinos Castrillón-Urbanización Soto IAR ya expuso la semana pasada en una reunión las quejas emitidas por algunos inquilinos, que registraban saltos en el diferencial de sus hogares. Pero la situación de este fin de semana ha sido excepcional. “Hemos tenido alrededor de cincuenta saltos del diferencial muy seguidos, concentrados en varios periodos del día”, dijo este vecino. Además, midió con un polímetro –instrumento para medir magnitudes eléctricas como corrientes y potenciales– la diferencia de potencial entre el neutro y la tierra, que debería ser de cero voltios, aunque es admisible por ley que haya “una diferencia máxima de unos cinco”, indica. Así, a lo largo del día se dieron valores muy dispares y superiores a lo permitido. “El pico máximo que hemos registrado ha sido de 125 voltios, pero la constante de la jornada del sábado fue de noventa”, aseguró. Esto supone problemas en las instalaciones eléctricas de los habitantes de O Castrillón y posibles averías en electrodomésticos. “Hay vecinos que se quejan de lavadoras y microondas estropeados por esta causa”, reconoció.
“Hay vecinos que se quejan de lavadoras y microondas estropeados por esta causa”, dicen desde el barrio
Fenosa no ofrece solución
“Llamamos a Fenosa, abren incidencia, vienen los técnicos, levantan alta y se van. Evidentemente el problema reaparece poco después”. Así definió el vecino de O Castrillón la respuesta de la empresa de suministro eléctrico, que fue insuficiente para paliar el problema.
El domingo la situación no mejoró demasiado. El diferencial continuó dando problemas en las viviendas, aunque en menor medida. Así, “se disparó unas ocho veces pero los picos en el neutro han sido muy altos”, explicó. De nuevo, la diferencia entre este y la tierra –que no debería sobrepasar los cinco voltios– llegó a los 23,74 voltios en horario de mañana.
Según el residente de O Castrillón, los técnicos suponían que lo que provocaba los constantes apagones era algún vecino que contase con un enchufe ilegal o que una instalación eléctrica en alguna vivienda estuviese induciendo las corrientes de retorno por el neutro, lo que afecta a todos los usuarios enganchados a dicho transformador.