Están dispuestos a llegar hasta donde sea necesario para llamar la atención del Ayuntamiento de Oza-Cesuras. Los vecinos del lugar de Carraceda dicen sentirse “desprotegidos” y denuncian la “discriminación” a la que, a su entender, los somete el Gobierno de González Cacheiro. “Un sábado quemaron los contenedores y, aunque avisamos en el momento, estuvimos sin ellos durante tres semanas, insistiendo cada día para que nos los repusiesen y ellos haciendo caso omiso de nuestras demandas”, explica Víctor García, quien asegura actuar como portavoz de los residentes en Carraceda.
En cualquier caso, para el vecindario, lo peor son los baches de la carretera y, sobre todo, la proliferación de alcantarillas sin tapa que, ante la falta de atención del consistorio, señalizaron ellos mismos con spray “para evitar una desgracia”, dice García. “Ellos pasan olímpicamente del tema, así que indicamos con un ‘ojo’ los lugares que suponen un riesgo, tanto para los vecinos como para quienes pasan por la zona, donde residen unas siete u ocho familias, “la mayoría temporalmente, porque el resto del tiempo lo pasan en A Coruña”. Este sería, a juicio de los afectados, uno de los motivos de la “marginación” del Ayuntamiento de Oza-Cesuras. “Aunque no tiene mucho sentido porque nosotros pagamos igualmente los impuestos por nuestras casas y servicios en Oza”, añade Víctor García.
Para los residentes en este núcleo, en la parroquia de San Pedro de Oza, choca que mientras el consistorio desatiende sus reclamaciones, cuestiones básicas en la mayoría de los casos, “sala anunciando a bombo y platillo inversiones millonarias en otras zonas”.