
c.r. > a coruña
El conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda, visitó ayer la ciudad para mantener una reunión de trabajo con el delegado provincial, Diego Calvo, pero no fueron los asuntos del día lo que interesó a los medios sino el futuro del representante del Gobierno autonómico en A Coruña. A solo cuatro días para que el delegado de la Xunta tome posesión como concejal en el Ayuntamiento de Ferrol, el PP todavía se niega a desvelar si él será el nuevo presidente de la Diputación y, por tanto, quien será el nuevo delegado.
A día de hoxe segue sendo Diego Calvo, falar doutra cousa é falar de futuribles, declaró el conselleiro. Ello, a pesar de que el actual portavoz autonómico en la provincia no podrá compaginar los dos puestos públicos. Calvo admitió desconocer el proceso concreto para renunciar a uno de los cargos, pero destaca que dispone de un plazo para hacerlo hasta que el día 11 se constituya la nueva corporación de la ciudad departamental, algo que corroboró Rueda: De aquí ao sábado hai tempo suficiente para tomar a decisión.
A mayores, el día 20 se deberá elegir un nuevo presidente de la Diputación y es obligatorio que forme parte del gobierno de un municipio de la provincia. Por tanto, para que Calvo sea un candidato formal hoy todos los rumores apuntan hacia él debería aceptar su puesto en Ferrol.
Alabanzas > Pese a la negativa de todos los miembros del Partido Popular a avanzar nombres para cubrir cualquiera de los dos cargos, las declaraciones de ayer del conselleiro hacia Calvo sonaron a despedida alabando una y otra vez su gestión al frente de la Delegación Provincial durante estos dos años. A Coruña non podía ter mellor delegado territorial o fixo un extraordinario traballo fueron algunas de las frases que Rueda dirigió a su compañero de partido, al tiempo que destacó que su sucesor será alguien a su altura que desarrolle una labor tan buena como él.
Precisamente la reunión de ayer pretendía hacer balance del último año y comprobar si el nuevo modelo implantado por la Xunta del PP en la que se eliminaron los delegados para cada consellerías y se sustituyeron por otro único seguía funcionando bien. Según Rueda, el ahorro, como en el caso del año pasado, es de cerca de seis millones de euros. As expectativas que se fixeron se están cumprindo, afirmó el conselleiro, que aclaró que esta rebaja en el coste del servicio no está influyendo en la calidad del mismo.
La Xunta defiende que se han mejorado los tiempos en al tramitación de expedientes y que la administración ha sabido acercarse a los ciudadanos al xestionar o día a día de cuestións que inflúen directamente na súa vida cotiá. Se refiere, por ejemplo, al registro de parejas de hecho, las solicitudes de justicia gratuita, la atención al público en el área tributaria o la gestión del parque de viviendas de promoción pública.
Rueda felicitó a Calvo por ser capaz de asumir las funciones que hasta ahora desarrollaban los delegados de diferentes consellerías. Gran parte dese traballo se concentrou nunha soa persoa, destacó el portavoz, sin olvidar a los jefes territoriales que comparten la labor.