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viernes | 19 abril | 2024
José María Díaz Fernández ha presentado su dimisión como deán de la catedral de Santiago de Compostela al arzobispo, Julián Barrio, confirmaron hoy a Efe fuentes de la curia catedralicia.
El Arzobispado, sin embargo, desmintió hoy en un comunicado de que la dimisión del deán se trate de "una exigencia" de la Conferencia Episcopal o del propio cardenal de Madrid y exarzobispo de Santiago, Antonio María Rouco Varela, como algún medio apuntó.
A raíz de la desaparición en julio de 2011 del Códice Calixtino del Archivo de la catedral, el arzobispo aceptó la dimisión de Díaz Fernández como canónigo-archivero.
Tras el robo del manuscrito del siglo XII, una joya bibliográfica que está considerada la primera guía de los peregrinos, Díaz Fernández asumió su parte de culpa.
"El canónigo archivero soy yo, y la responsabilidad me corresponde a mí", había reconocido textualmente.
A raíz de la desaparición del Códice, recuperado al año de su desaparición en un garaje propiedad de Manuel Fernández Castiñeiras, extrabajador de la catedral y persona muy vinculada al deán, Díaz Fernández sufrió numerosos quebraderos de cabeza y achaques de salud.
Tal es así, que él mismo había reconocido en declaraciones a Efe que su estado se había resentido a raíz de estos hechos y que había llegado a ser ingresado en un centro hospitalario.
Hombre de edad ya avanzada, Díaz Fernández declaró a Efe, al ser preguntado por el motivo de su dimisión, que prefería "no conversar sobre el asunto" y que se sentía "en paz y tranquilo".
