La nueva aerolínea operará bajo el nombre de American Airlines bajo la sede de ésta en Fort Worth (Texas), y tendrá una capitalización de unos 11.000 millones de dólares y unos 94.000 empleados.
La compañía operará 950 aviones con 6.500 vuelos diarios, nueve aeropuertos centrales, 187 millones de pasajeros al año y una facturación anual de casi 39.000 millones de dólares.