El tradicional lanzamiento chupinazo, a cargo del concejal de Nafarroa Bai, Iñaki Cabasés, dio inicio ayer al mediodía a los sanfermines 2012, durante los que Pamplona se convierte en una de las capitales mundiales de la fiesta por excelencia.

Un total de 431 actos conforman el programa oficial para estas 204 horas ininterrumpidas de juerga que se registrarán en la capital navarra hasta que, a los sones del Pobre de mí, los sanfermines se despidan el próximo día 14.

Las fiestas comenzaron sin poder cumplir uno de los objetivos que se había propuesto el alcalde, la recuperación del Riau riau, que se suspendió por los incidentes causados por un grupo de personas en la plaza del Ayuntamiento. Un policía municipal resultó herido en la cara por el impacto de una botella lanzada durante los incidentes.

Desde 1996 no se celebra el Riau riau a causa de los continuos incidentes durante el recorrido que hace la corporación municipal hasta la iglesia de San Lorenzo, donde se custodia la imagen de San Fermín. n