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viernes | 19 abril | 2024
La cobertura de fibra óptica en España ha crecido exponencialmente en España, lo que está permitiendo una mejor conexión a Internet. No obstante, ocurre en muchas ocasiones que esa incorporación de la fibra óptica de calidad solo alcanza a las áreas urbanas y mejor conectadas.
Ese es el territorio en el que se centran principalmente las grandes operadoras de telecomunicaciones, pues es el sector de público donde pueden atraer más cuota de mercado. En nuestro país contamos con varias operadoras de telefonía e Internet bien asentadas en el mercado que incluso están explorando la vía de las filiales low cost como vía para seguir ganando cuota de mercado.
No obstante, se sigue echando en falta alguna opción para las áreas rurales o las más alejadas de los núcleos urbanos densamente poblados. Ese es el hueco que lleva años cubriendo Adamo, una empresa española con sede en Barcelona que nació en 2007 y que siempre ha mantenido una vocación nacional destinada a cubrir demandas regionales y locales.
Adamo ha supuesto un soplo de aire fresco al mercado de las operadoras de telecomunicaciones. Su punto fuerte es que ofrece fibra de alta velocidad, 1.000 Mb, a precio competitivo. Su cuota principal de mercado son las áreas rurales y las nuevas zonas urbanas con alta densidad de población.
En la actualidad cuenta con infraestructura propia y ofrece servicios de telefonía fija y móvil y opciones para el mercado empresarial y mayorista. En los últimos meses, el Gobierno ha adjudicado ayudas por valor de 72 millones de euros a esta empresa para el despliegue de fibra en zonas rurales.
De este modo, la empresa amplía su presencia en Galicia, pues la operadora tiene ya cobertura en Outeiro de Rei. Mondoñedo, Vilalba, Burela, Viveiro, Meira, Ribadeo y Begonte.
Estas ayudas millonarias están cofinanciadas por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y el objetivo es extender la banda ancha ultra rápida a todo el territorio nacional para reducir la brecha digital y contribuir a eliminar el reto demográfico.
Con estas ayudas, además de la inversión propia, Adamo se compromete a desarrollar proyectos para ofrecer Internet de calidad por valor de 165 millones de euros.
La apuesta de Adamo por hacer llegar una conexión a Internet de calidad a las zonas rurales se ve ahora premiada con estas ayudas millonarias, pero su labor se expande hacia otras iniciativas.
Así, el pasado verano presentó la campaña Vuelve para conectar, que cuenta con el aventurero y comunicador Jesús Calleja como embajador. La idea no es otra que intentar conectar todos los rincones del país mediante fibra óptica de 1.000 Mb.
La finalidad es llegar a todas aquellas áreas que tradicionalmente han estado olvidadas por las grandes operadoras. Un intento para hacer resurgir las áreas rurales y obtener cuota de mercado en la España vaciada para que no se convierta en la España desconectada.
Como parte de este proyecto, que incluye la inversión de 250 millones de euros en municipios poco poblados, basta con que 30 vecinos de una localidad se pongan de acuerdo y la compañía instalará la fibra óptica más veloz de la actualidad. En algunos casos, no es necesario siquiera alcanzar esos 30 vecinos o pueden lograrse entre varios municipios.
Las Ofertas fibra óptica de Adamo van más allá que su apuesta por la revitalización de las áreas rurales. El trabajo de renovación de la operadora le está permitiendo mejorar sus tarifas y sus servicios, ofreciendo novedades en todos sus productos.
Su tarifa SuperFast, por ejemplo, es líder en bajada y carga de archivos, 1.000 Mbps. Está pensada especialmente para aquellos usuarios que necesiten Internet de calidad y totalmente seguro. Empresas, gamers o personas que teletrabajan y hacen un uso intensivo de Internet consumiendo muchos recursos.
Otra opción entre sus ofertas Internet en casa es la Fibra Fast, que iguala la velocidad de descarga de la SuperFast pero recorta un poco la de subida, 600 Mbps. Una tercera alternativa, esta para usuarios que requieran menor velocidad, es la Fibra esencial, con 100 Mbps en subida y descarga. Esta última, no obstante, también mejora, pues pasa de 50 y 5 Mbps a 100.
La apuesta por llevar Internet a zonas rurales y su marcado carácter regionalista y localista ha propiciado que en la actualidad Adamo sea ya considerada como una operadora de telecomunicaciones de confianza.
Su calidad en la prestación de servicios permite equiparar a la operadora a otras grandes del mercado, con la mayor velocidad posible en España y la posibilidad de contratar paquetes colectivos o individualizados. Y todo ello desde el firme convencimiento de que todo el territorio puede y debe disponer de Internet de calidad, siendo esta la mejor fórmula para reducir la brecha digital
