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sábado | 20 abril | 2024
La Fiscalía ha solicitado la apertura de un juicio oral contra un hombre, P.T.S., acusado de atracar a otro y agredirle con sus propias muletas. La singular agresión tuvo lugar hace cinco años y medio en la avenida de La Marina. La víctima, M.R.C., se encontraba por la zona de madrugada cuando fue abordado por el acusado que le pidió 10 euros; al negarse el otro, trató de arrebatarle la mochila que llevaba.
En medio del forcejeo, el acusado, que por aquel entonces tenía 18 años, empujó en la pierna a la víctima que cayó al suelo inmediatamente, pues llevaba muletas para caminar. Fue entonces cuando el joven cogió uno de los bastones y comenzó a golpear a M.R.C. en la cabeza al tiempo que decía, según recoge el escrito del fiscal, “suelta la mochila o te mato”.
Otro individuo se enfrenta a cuatro años de cárcel por estallar un vaso en la cara
a un joven en el Orzán
La víctima soltó finalmente la bolsa en la que llevaba 60 euros en efectivo y diversos objetos cuyo valor no ha sido estimado. A consecuencia de la agresión, sufrió un traumatismo craneal y una contusión en la mano derecha para las que necesitó asistencia médica y cinco días de curación.
El Ministerio Fiscal concluye que los hechos relatados son constitutivos de un delito de robo con intimidación con la circunstancia agravante de abuso de superioridad. Por ello, solicitan para P.T.S. una pena de cuatro años de prisión y una multa de diez euros diarios durante dos meses. Además, en concepto de responsabilidad civil, piden para la víctima una indemnización de 200 euros por los dos días que estuvo incapacitado y de 120 euros por cada uno de los días de curación.
Altercado en un pub > Una pena similar también solicita el fiscal para otro hombre que protagonizó un violento altercado en un pub de la calle Sol en octubre de 2009. El acusado se encontraba en el local acompañado por un amigo cuando tuvieron una discusión con otros dos jóvenes. En un momento dado, el encausado levantó un vaso de cristal que llevaba en la mano y golpeó a uno de sus interlocutores en la cara, con tanta fuerza, que el objeto estalló en el momento del impacto. La víctima sufrió numerosos cortes en la cara producidos por el cristal que requirieron de limpieza quirúrgica y varios puntos de sutura. Además le quedaron importantes secuelas, como múltiples cicatrices en mejillas y frente y la parálisis de uno de los nervios faciales.
El autor de la agresión se enfrenta a un delito de lesiones con deformidad, que puede costarle cuatro años y seis meses de prisión y una multa de más de 25.000 euros, mientras que su amigo –que propinó varios golpes a la víctima– está acusado de una falta de maltrato.
