Jesús “Chero” Celemín cierra otro año como maestro de ceremonias favorito

Jesús “Chero” Celemín cierra otro año como maestro de ceremonias favorito
El edil de Educación, Jesús Celemín | pedro puig

Jesús “Chero” Celemín, cuarto teniente de alcaldesa y concejal de Educación, Memoria Histórica, Innovación, Industria y Empleo cerró 2021 como maestro de ceremonias favorito en el Ayuntamiento y ya podría decir aquello de “No es mi primera vez” que cantaba Xoel López con Deluxe. Con 60 casamientos a sus espaldas el año pasado, repite como preferido y supera en un 215% a las dos concejalas con mayor actividad, María García y Eva Martínez Acón, con 19 cada una.

Celemín ofició el 26,6% del total de las bodas civiles en María Pita, que ascendieron a 225. Además del edil de Educación y las dos inmediatas seguidoras, el resto de matrimonios se los reparten Diana Cabanas, Juan Díaz Villoslada y Claudia Delso, con 16 cada uno; Yoya Neira, con 15; Mónica Martínez y Silvia Cameán, con 13; Esther Fontán, con 12; Inés Rey, con 11; Juan Ignacio Borrego, con cuatro; Avia Veira y Antonio Deus, con dos cada uno; y José Manuel Lage, Francisco Jorquera, Roberto García, Roberto Coira, Nazareth Cendán, Iago Martínez y Alberto Lema, con uno todos ellos. 


El edil ofició el 26,6% de los casamientos totales del Ayuntamiento, que en este mandato siguen siendo gratuitos 



“Suelo leerles la letra de una canción según la impresión de los contrayentes: su edad, lugar de origen... Los autores a los que más recurro son Serrat, Juan Luis Guerra, Osvaldo Farrés, Manuel Alejandro, León Felipe, Isolina Carrillo... A veces cojo la guitarra y les canto algo”, cuenta Celemín, que destaca como “lo más importante” que la pareja “se sienta cómoda y disfrute de la ceremonia porque es un momento único”.



Curiosidades


Entre las curiosidades del año, además de las múltiples cancelaciones debido al covid –un total de 38–, se encuentran episodios como uno en que los perros de la pareja entregaron los anillos, uno en que los novios se intercambiaron dos relojes en lugar de alianzas y otro en el que la madre de la novia no portaba mascarilla por prescripción médica y tuvo que presentar la documentación pertinente.

Hubo dos ceremonias con traductor de lengua inglesa y otra con intérprete de lengua de signos, además de una que tuvo que posponerse a última hora por el contacto de la novia con un positivo. Quince parejas realizaron dos cambios de fecha, cuatro la movieron tres veces y una tuvo que reprogramarla hasta en cuatro ocasiones.

El Ayuntamiento mantiene este mandato la gratuidad de las bodas civiles, una medida adoptada por el anterior Gobierno local. Con el PP en la Alcaldía dar el “sí quiero” en el palacio municipal costaba 125 euros, algo que algunos partidos criticaron en su momento por corresponder la tasa más alta de toda Galicia. 

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