10º-19º
sábado | 20 abril | 2024
La mini ‘crisis’ que atraviesa el Deportivo aumentó ayer con el tercer partido seguido sin vencer de los blanquiazules, que suman un solo punto de nueve posibles y son cuartos en la tabla. Un bache de tres jornadas que los coruñeses comenzaron con su partido a domicilio ante Unionistas, líder de la categoría.
El cuadro herculino llegaba al Reina Sofía como indiscutible líder, tras sumar cuatro victorias consecutivas y haber dejado en todos los choques su puerta a cero.
No pudo, no obstante, con el cuadro salmantino, aunque el duelo comenzó de cara para los blanquiazules, que se adelantaban en el 14 gracias a un tanto de Alberto Quiles. Pero en apenas diez minutos Unionistas le daba la vuelta al marcador, con dianas de Salinas y Pablo Espina.
Aunque los herculinos merecían, al menos, el empate en el luminoso, no eran capaces de marcar las opciones que tenían y rubricaban la primera derrota de la temporada.
El Deportivo regresaba a un Abanca Riazor con mayor aforo, debido a la relajación en las restricciones derivadas del covid19, y con el propósito de volver a sumar de tres ante la SD Logroñés.
No empezaba mal el encuentro para los herculinos, que en el minuto 18 se ponían por delante gracias a una diana de Miku. Los blanquiazules tenían ocasiones para irse con mayor renta al descanso, pero no eran capaces de afinar la puntería. Su rival se iba creciendo con el paso de los minutos en la segunda parte y echaba el resto buscando el empate, que acababa encontrando ya en el añadido.
Con el Depor encerrado en su campo, era Ledo el que cabeceó ante un despiste de la zaga para poner el 1-1 en el luminoso, ser de nuevo el ‘salvador’ de su equipo y ‘birlarle’ dos puntos al Depor en el último suspiro de la contienda.
El último encuentro, ante el Real Unión de Irún, fue posiblemente en el que más dominio blanquiazul hubo, pero esto no se tradujo en victoria.
El Deportivo se repuso a un tempranero tanto de Bravo, tras un grave fallo defensivo y logró empatar, en la segunda, por medio de Noel.
Pero, con el equipo controlando la posesión y el encuentro, los herculinos sufrieron una pérdida en campo rival, que derivó en una contra en la que el equipo hizo un mal balance defensivo y vio como entre Iván Pérez y Bravo fabricaban el segundo. Una nueva derrota que convierte el bache en socavón.
