Un tercer análisis de la Xunta confirma la aptitud para el baño de la playa de Gandarío

Un tercer análisis de la Xunta confirma la aptitud para el baño de la playa de Gandarío
25 junio 2014 / 01 julio 2014 página 21 Bergondo.- Un análisis de agua detecta fecales en un extremo de la playa de Gandarío

Una nueva analítica del agua en la playa de Gandarío, realizada por la Xunta el lunes, confirma que esta recuperó los niveles óptimos para el baño, ya que, al igual que el 23, el examen arroja “unos valores normales de bacterias”, informó el Ayuntamiento de Bergondo.
En cualquier caso, la administración municipal reiteró su determinación para hallar el origen del vertido que ocasionó la contaminación y los malos valores, posiblemente debido al vaciado de una fosa séptica al conducto de pluviales de Ouces. Para la inspección de la red se utilizará una cámara robot, explican fuentes del grupo dirigente, que también adelantaron que se realizarán análisis del agua propios para llevar una vigilancia y control de la calidad del agua de Gandarío.
Los resultados llegan un día después de que la corporación local celebrase, a petición del PP y Veciños de Bergondo (VB), un pleno extraordinario para la constitución de un grupo de trabajo permanente “para salvar as praias de Bergondo”. Durante la sesión, Anova Irmandade instó a PP y VB a “promover unha moción de censura contra a actual alcaldesa e erixirse en novo goberno” y abandonar así el “populismo fora de todo lugar” que este grupo nacionalista  achaca a una maniobra electoralista “da dereita de Bergondo”.
Una opinión que no comparte el portavoz del grupo localista, Manuel Fafián, que acusó a Anova de adoptar “la misma actitud que la alcaldesa socialista”, “tacharnos de populistas y generar miedo” y “exigirnos una moción de censura con el PP”.
Por su parte, el Bloque Nacionalista Galego, sin representación en la corporación local, reclamó “o saneamento integral da ría para garantir a calidade da agua nas praias de Bergondo”. Cristina López, responsable del BNG das Mariñas, considera que “non é normal que se malgasten cantidades tremendas de cartos en toneladas de area, como no caso da Grande de Miño, sen estudar as correntes e saber onde vai acabar, e, pola contra, se manteñan vertidos directos a ría de Betanzos”.  n

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