El claustro románico de Palamós es una construcción auténtica del siglo XII, según el profesor de historia del arte de la Universidad de Girona (UdG) Gerardo Boto, que ha podido visitarlo hoy por primera vez tras descubrirlo a través de una revista francesa de decoración.
Boto, que prefiere sin embargo dejar el veredicto final en manos de los técnicos de la Generalitat que ayer accedieron al emplazamiento para realizar las pruebas necesarias, ha admitido, sin embargo, que para él la antigüedad de la pieza no admite dudas.
El desgaste de la piedra y, sobre todo, un emblema heráldico en forma de castillo y que representa la corona de Castilla, es una de las claves del origen del claustro.
Gerardo Boto ha accedido hoy a la finca Mas del Vent, donde se halla la construcción, en la primera visita abierta a medios de comunicación, después de que los dueños de esta masía permitieran ayer la presencia de los técnicos de la Generalitat.
El presidente del consejo de administración de la empresa Explotaciones Agrícolas y Forestales Brugarol, propietaria del terreno, Josep Comas, ha manifestado su predisposición a colaborar con la investigación y a aceptar el dictamen de la normativa patrimonial, si se confirma la autenticidad del claustro.
Comas ha explicado que, entre la documentación que dispone la empresa, figura el contrato de compraventa del monumento a un particular en Madrid en 1958, por el precio final de un millón de pesetas de la época (6.000 euros).