El Ayuntamiento de Coirós denunció ante el Puesto de la Guardia Civil de Betanzos el robo de una veintena de placas fotovoltaicas del complejo deportivo de A Cortella. El alcalde de la localidad, Francisco Quintela, manifestó su malestar y preocupación ante este nuevo suceso y reiteró la necesidad de ampliar la presencia en el municipio de los cuerpos y fuerzas de seguridad de Estado.

Los paneles sustraídos formaban parte del dispositivo de 56 placas fotovoltaicas instaladas en la cubierta de la grada del campo de fútbol de A Cortella. Un grupo de operarios del Servicio de Obras se percataron de la desaparición de las planchas, 18 en total, ayer a primera hora la mañana, por lo que todo apunta a que el asalto se produjo de madrugada sin que nadie detectase ningún movimiento sospechoso, lo que resulta demasiado extraño teniendo en cuenta la ubicación, bastante aislada, del complejo de A Cortella.

Valoración > Quintela explicó que el material sustraído “tiene un gran valor económico” y los costes de reposición serán elevados, “aún pendientes de valoración por parte de los técnicos del Ayuntamiento de Coirós.

La proliferación de este tipo de sucesos en la localidad, y en especial en las instalaciones deportivas, donde “se vienen repitiendo robos, intentos de robo y actos vandálicos con destrozos graves den la piscina”, ha llevado al regidor popular a insistir, como ya han hecho sus homólogos en otros ayuntamientos de la comarca, en la urgencia de incrementar la vigilancia por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado.

Así, hace poco más de un año, el Ayuntamiento de Coirós denunció el robo del sistema de iluminación monumental de la iglesia parroquial de San Vicente Armea. Entonces, e informe de daños realizada por los técnicos del consistorio fijó en 2.000 euros las pérdidas económicas, ya que el asalto afectó a un sistema de alumbrado instalado hacía sólo unos meses en los templos de Armea, Collantres, Coirós, Santa María y Santiago de Ois, Lesa y A Espenuca.

En los últimos meses, los alcaldes de varios municipios como Curtis, Abegondo, Cesuras, Oza dos Ríos, Irixoa y el propio Coirós firmaron un acuerdo en el que se exigía más presencia de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en toda la comarca interior de Betanzos. En aquella reunión, el alcalde de Curtis, Javier Caínzos Vázquez, advirtió de la “escasez” de efectivos y de la “situación de precariedad” del Puesto de la Guardia Civil de Curtis.