03- Advierten del riesgo que ofrece una parte del parque de San Diego por su abandono

R.L. > A CORUÑA
  Varios vecinos de Os Castros han manifestado en los últimos días su malestar por el estado de abandono que presenta parte del parque de San Diego y que se ha convertido en una amenaza para la salud pública, en una zona frecuentada por niños.
En concreto, las quejas tienen uno de sus focos en los aseos que se encuentran en la parte baja del parque, en su confluencia con la acera de la avenida del Ejército. Dichos baños llevan años cerrados y en su entorno se pueden ver varias jeringuillas entre la basura.

Cañaveral > También han denunciado que en la parte que linda con el Puerto existe un cañaveral de bambú que sirve de refugio para que algunos hagan sus necesidades.
Estas protestas por el abandono y la falta de aseos públicos han llegado ya en reiteradas ocasiones a María Pita, pero lo único que han conseguido los usuarios del parque es la instalación de un baño “de obra”, que solo los más valientes se atreven a utilizar.
Las quejas se tradujeron hace una semana en una curiosa y anónima protesta que consistió en colocar media docena de orinales amarrados a otros tantos árboles. Días después, el pasado jueves, los vecinos creyeron que el Ayuntamiento había reaccionado al comprobar la presencia de dos obreros con un vehículo y un remolque, pero la decepción fue mayúscula cuando comprobaron que se trataba de jardineros y no de una brigada de limpieza.

Bolardos y ruinas > Las quejas por el estado del parque de San Diego se suman a viejas reivindicaciones del barrio como las dificultades que plantean a los servicios de emergencia los bolardos instalados en el mirador, las grietas y filtraciones del aparcamiento subterráneo o el abandono de algún edificio en ruinas.
Sobre éste último aspecto, algunos vecinos de la parte alta de General Sanjurjo advierten de que uno de los inmuebles abandonados lleva días sufriendo desprendimientos sin que nadie haga nada por asegurarlo.