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sábado | 20 abril | 2024
daniel romero > sada
Si algún vecino de Sada pretende saber, a día de hoy, lo que va a pasar dentro de 24 horas en el salón de sesiones del edificio de Ayudantía mañana a mediodía, lo lleva claro. Una cosa parece segura: la alcaldía se la van a disputar Ernesto Anido (PP) y Abel López Soto (BNG). Y la decisión está en manos de quien fuera alcalde de la localidad durante 28 años, Ramón Rodríguez Ares, líder del PDSP, que tiene en el voto de sus cinco concejales la respuesta al enigma que desde hace casi tres semanas merodea por cada esquina del municipio.
Esta es la apuesta del Partido Popular, tercera fuerza más votada que, con sus cuatro concejales, se plantea un gobierno en franca minoría la mayoría absoluta son nueve y con el único ofrecimiento al resto de fuerzas de la derecha de alcanzar acuerdos puntuales a lo largo de los próximos cuatro años. Por este motivo, pidió el voto al PDSP en la sesión de investidura de mañana, lo que evitaría que gobernase la lista más respaldada en las urnas, la del BNG.
Anido, que se reunió con Rodríguez Ares esta misma semana ni siquiera se conocían personalmente hasta entonces, le hizo saber al exalcalde que la postura de los populares era que la derecha aunara esfuerzos para desterrar al gobierno de izquierdas que, formado por nacionalistas y socialistas, llevó las riendas de Sada durante el mandato que hoy mismo termina.
Eso sí, el representante popular le trasladó a Rodríguez Ares que esas fuerzas no iban a compartir gobierno ni se iban a comprometer a nada. Simplemente, le pidió el voto para el PP en la investidura sin nada a cambio. Simplemente eso, evitar que el Bloque continúe en el poder.
El Partido Popular sabe que esa es la máxima preocupación del fundador del PDSP, quien en campaña llegó incluso a pedir, directamente, el voto contra el BNG en lugar de hacerlo para él mismo.
Con eso está jugando por tanto Anido y su equipo, sabedores de los deseos del exregidor. El problema es que este órdago es un todo o nada. O le votan a él, o sigue López Soto, probablemente con el PSOE.
En esta tesitura se ve por tanto Ramón Rodríguez Ares, que incluso ha pensado en la posibilidad de no entrar en este juego y dejar que la izquierda siga al frente del Ayuntamiento. De hecho, fuentes del Partido Demócrata Sada Popular han asegurado que si no hay contraprestaciones que estén bien atadas a un hipotético voto a favor del PP, dejarán que sea el BNG el que se haga con el bastón de mando una vez más. Votos sin pacto de por medio es inviable, aseguran.
Una palabra, pacto, que Anido asegura que no está en su diccionario. Yo nunca he pronunciado esa palabra y nunca he vendido una negociación porque no la ha habido, insiste Ernesto Anido quien, no obstante, tiene esperanzas de que los cinco ediles del PDSP le apoyen en la investidura de mañana aunque no haya nada firmado.
De la misma madre > A pesar de formar un hipotético gobierno con cuatro ediles, la intención de Anido es que las tres formaciones de centroderecha, vuelvan a ser una sola.
¿Por qué no volver a estar en el mismo punto? Somos todos de la misma madre, afirmó al recordar que Rodríguez Ares fue el responsable del PP sadense durante dos décadas y Campos dejó el partido hace ocho meses.
