El nudo de Ledoño se convierte en el primer punto negro de la Tercera Ronda

El nudo de Ledoño se convierte en el primer punto negro de la Tercera Ronda

Todavía no está finalizada pero ya cuenta con su particular punto negro. En el núcleo cullerdense de Ledoño los automovilistas que pretenden abandonar la AC-14, más conocida como Tercera Ronda, para incorporarse a la autovía A-6, en dirección al municipio de Arteixo, pueden encontrarse con un “escollo” que eche abajo sus intenciones.
Se trata, en concreto, de la glorieta elevada, que sirve de enlace entre los dos viales de alta capacidad. Allí se han registrado hasta la fecha un gran número de accidentes de tráfico que los vecinos achacan en la misma medida a la velocidad de los vehículos siniestrados y a las deficiencias que, según ellos, en el lugar presenta la calzada de la Tercera Ronda.
Los residentes indican que los conductores que pretenden abandonar la AC-14 para incorporarse a la autovía en dirección a Arteixo, Carballo o Meirama no suelen respetar la velocidad que se encuentra limitada a 40 kilómetros por hora y más de uno ya colisionó con el muro de seguridad que evita que los vehículos puedan caerse a la autovía.
Sin embargo, las repetidas colisiones han hecho mella en el hormigón por lo que los trabajadores de la empresa que gestiona el servicio de mantenimiento del vial han tenido que colocar varios conos como señal de alerta.
No obstante, los vecinos de Ledoño se muestran preocupados por este hecho ya que consideran que si se vuelve a producir un accidente, de similares características a los anteriores y en el mismo lugar, los conos no servirán para evitar que tanto el coche siniestrado como sus posibles ocupantes se precipiten sobre la A-6.
Hasta el momento aseguran que tal episodio no ha tenido lugar a pesar de que se han producido accidentes de consideración, aunque sin víctimas mortales, pero que tal vez la próxima sí pueda ser la primera, con el riesgo añadido que eso conlleva.
Consideran que debería adoptarse algún tipo de medida de seguridad para que los conductores se vean obligados a reducir la velocidad cuando se aproximan a la rotonda elevada. Podrían ser, entre otras, las mal llamadas bandas rugosas o incluso instalar semáforos o radares.
El tramo cullerdense de la Tercera Ronda, que enlaza Ledoño con A Zapateira, entró en servicio en abril de 2011. Tiene una longitud de seis kilómetros de autovía y un ramal de conexión de casi tres para el acceso al aeropuerto de Alvedro desde la AC-14 y posterior conexión con la carretera N-550 en el entorno del aeropuerto. En total, el Ministerio de Fomento destinó 113,7 millones de euros a la construcción de este tramo.

Características >
La AC-14, en Culleredo, tiene dos calzadas con dos carriles por sentido de 3,5 metros de ancho y arcenes exteriores de 2,50 m e interiores de uno, separadas por una mediana de nueve metros.
El ramal de acceso al aeropuerto de Alvedro es una carretera convencional con dos carriles de 3,5 metros y arcenes de 1,50. Se incluye además un tramo de 1.200 metros de carril adicional para vehículos lentos. La obra contiene como elementos más significativos la construcción de tres viaductos: Rego de Castro; Rego de Trabe y A Ermida, dentro del ramal del aeropuerto de Alvedro, y cuatro túneles artificiales: Rías Altas 1, Rías Altas 2, A Zapateira y A Garrocha. Además, se construyeron siete pasos superiores y nueve pasos inferiores para garantizar la adecuada permeabilidad de la obra.
El tratamiento medioambiental de las obras incluyó la revegetación de taludes y áreas de vertederos, la disposición de barreras antirruido y la adecuada permeabilidad transversal de la obra.

El nudo de Ledoño se convierte en el primer punto negro de la Tercera Ronda

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