Navantia construirá el flotel de Pemex con un modelo de gestión que reduce “costes y plazos”

El presidente de Navantia, José Manuel Revuelta, acudió ayer al astillero de Ferrol para mantener una reunión con alrededor de 80 directivos relacionados con el programa de construcción del flotel de Pemex y anunciar la puesta en marcha del mismo bajo un nuevo modelo de gestión con el que la compañía pretende ahorrar tiempo y costes.
El comité aprovechó la visita, que le cogió por sorpresa como a muchos de los asistentes a la reunión, para forzar una entrevista con el máximo responsable de la compañía de la que apenas se extrajo un compromiso, la revisión del marco de relaciones con la industria auxiliar.
Revuelta se encontró con el comité pasadas las doce del mediodía en el edificio de formación del astillero, mientras que a sus puertas unos 200 trabajadores secundaban una concentración. Aproximadamente la mitad entraron en el inmueble superando la tímida resistencia que plantearon los vigilantes de seguridad y continuaron la protesta en el interior del mismo lanzando gritos de “dimisión!”, aunque unas dos horas después el presidente de Navantia salió sin problemas.
Cabe recordar que la de ayer es la primera visita de Revuelta a Ferrol desde que en enero de 2013 comunicó, en la última reunión de seguimiento del dique flotante, que Navantia abandonaba dicho proyecto. Como se recordará, en aquella ocasión el responsable y el resto de los representantes institucionales de la comisión fueron “sitiados” por los trabajadores durante más de diez horas.
Del encuentro de ayer con la parte social tampoco pudieron extraerse buenas noticias. El presidente de Navantia no aportó nueva información sobre el reciente anuncio del ministro Montoro y se limitó a refrendar que se está estudiando el encargo de un buque que dará carga de trabajo a la ría de Ferrol y a Cádiz, “lo que en vísperas de elecciones es como decir nada”, señaló ayer Ignacio Naveiras, portavoz del comité.
Tampoco explicó Revuelta el reciente cambio de criterio con respecto al reparto de los bloques del flotel, un 40% de los cuales iba a construir inicialmente el astillero de Fene. El responsable de la compañía pública se limitó a asumir la decisión, por más que los representantes del comité le reprocharon lo que entienden como una simple mentira, tanto en el caso del encargo de Pemex como en los cuatro gaseros que planeaban para Fene y Puerto Real antes de que fueran adjudicados a astilleros asiáticos.
“Lo que nos vino a decir es que Fene no va a trabajar en nueve meses”, señaló el presidente del comité de aquel astillero, Jorge Prieto, que apuntó a las insinuaciones del presidente en cuanto a posibles desplazamientos de los trabajadores. “Ya le trasladamos nuestra negativa”, dijo.
Revuelta aseguró en el encuentro que la decisión de respetar el veto de la Unión Europea es la mejor garantía de futuro para el astillero de Fene y dio por sentado que a partir del 1 de enero de 2015 no persistirá ninguna limitación para esta factoría ni para el grupo.
Según Ignacio Naveiras, portavoz del comité, la parte social le recordó al presidente, en este punto, que los acuerdos firmados en 2005 por el Gobierno establecen que el veto es reversible y que el 23% de paro que existe en la comarca es un argumento válido para ir a Bruselas a reclamar el final de las restricciones.
El comité acogió con ciertas reservas el anuncio del nuevo modelo de gestión que Navantia va a implementar en la construcción del flotel, según dijo Naveiras, “en primer lugar por la falta de información”.
El portavoz de la parte social llamó la atención sobre el hecho de que en la reunión con los directivos del astillero se abrió un turno de preguntas en el que nadie tomó la palabra. “Es algo que tiene que hacer reflexionar al presidente”, dijo Naveiras.
Por su parte, la compañía señaló que el sistema de gestión Lean, orientado a la mejora de los procesos, permitirá entregar el barco al cliente antes de que termine el plazo de 29 meses, el 13 de julio de 2016.
Revuelta manifestó su voluntad de diálogo tanto para abordar esta cuestión relativa al modelo de gestión como para revisar el modelo de relaciones de la compañía con la industria auxiliar, otro tema que el comité puso sobre la mesa. Según el presidente, está dispuesto a abrir el debate sobre esta cuestión, sobre la que las diferentes fuerzas sindicales han polemizado en las últimas semanas.
La lluvia de ayer motivó la suspensión de la movilización que había convocado el comité, ligada al desfile de comparsas. n