Un turismo que circulaba por la calle de Sánchez Bregua comenzó a arder ayer sin motivo aparente alrededor de las tres y cuarto de la tarde. El vehículo ocupaba el carril central cuando del capó empezó a salir humo y fuego. El conductor del vehículo, sorprendido, lo abandonó a toda prisa ante el temor de quedar atrapado. Cuando llegaron los bomberos, las llamas ya se habían propagado hacia el interior y habían quemado el volante y el salpicadero.
Los servicios de extinción no pudieron hacer nada para evitar los daños en el vehículo, que tuvo que ser retirado mediante una grúa. Mientras tanto, la Policía Local cortó al tráfico la calle.
Durante diez minutos, fue necesario desviar toda la circulación, aunque fuentes del 092 señalan que, debido al escaso volumen de vehículos que circulaba a esas horas, no se produjeron importantes retenciones. A medida que los bomberos continuaban su trabajo, se pudo abrir un carril y veinte minutos más tarde finalizaban las tareas.
Se desconocen las causas que provocaron el fuego, aunque dado que se inició en el motor, y que el vehículo estaba en circulación en el momento de los hechos, se da por sentado que se debió a un fallo mecánico.
No es el primer suceso de este tipo que tiene lugar en lo que va de año, pero sí el primero que se da cuando el coche está en movimiento. Los otros tres que se registraron anteriormente fueron coches que se encontraban estacionados.
Es habitual que los vehículos que se incendian cuando están parados tengan el foco del fuego en el interior del habitáculo, lo que indica intencionalidad. En algunos casos, los vehículos fueron descubiertos en lugares aislados, y en otros se sabe que fueron robados, por lo que se sospecha que el fuego lo causaron los mismos ladrones para eliminar cualquier pista que pudiera llevar a su detención.