Un acusado de abusar de un niño de seis años dice que éste "contaba mentiras"

Un hombre acusado de haber amenazado a su expareja y de abusar del hijo de ésta, de seis años, ha alegado hoy que el menor "contaba mentiras" y la madre del crío ha dicho que el procesado le contagió a ella la sífilis y que el pequeño podría haber tenido alguna enfermedad de transmisión sexual en ese momento.
La sección primera de la Audiencia Provincial de A Coruña ha acogido hoy una vista oral contra Agustín L.I. por unos presuntos ilícitos ocurridos en torno al mes de mayo de 2008 en el partido judicial de Ferrol que podrían acarrearle casi once años de cárcel.
Por el delito de abuso sexual continuado la Fiscalía pide nueve años de prisión, mientras que por los dos de amenazas suma un año y nueve meses, además de órdenes de alejamiento contra los dos afectados y de una indemnización de 12.000 euros.
El acusado ha negado todas las supuestas amenazas contra su expareja y sobre su relación con el menor ha dicho que "aunque no era su padre, tenía que ejercer de padre" porque ella le "mandaba".
Según su versión, nunca mantuvo relaciones sexuales con el menor y negó que el abuelo del pequeño lo descubriese una vez con una erección mientras pasaba el pene por la cara del niño.
Sobre su expareja, que declaró haberse quedado embarazada dos veces de él y que en sendas ocasiones abortó, ha relatado el acusado que en cuatro años nunca supo nada de embarazos y también que nunca hubo problemas hasta que dejaron la relación, pese a que él "sabía que tenía relaciones sexuales con otras personas" porque ella misma lo contaba.
La madre del menor ha asegurado que las supuestas amenazas que ella misma recibió llegaron incluso a unos golpes con las muletas, algo que no contó en un inicio.
También ha relatado que su hijo estaba amenazado por su expareja, que "tenía miedo" y que cuando éste abandonó el domicilio, "empezó a contar cosas" relativas a supuestos abusos o intenciones manifestadas por el acusado.
Ella tuvo sífilis, según su testimonio, por su relación con el procesado, del que dice que poseía revistas pornográficas de contenido homosexual, e incluso que el niño llegó a tener una enfermedad que podría ser de transmisión sexual.
La abuela del pequeño ha contado que su nieto tuvo que ir al psicólogo y el abuelo ha afirmado que vio cómo le pasaba el pene erecto por la cara y que incluso intentó agredirlo a él.
El padre del menor ha subrayado que "todavía tiene muchas secuelas" y que "odia a Agustín", pues incluso tiempo después manifestaba opiniones negativas sobre él.
Hasta tres psicólogas han considerado que el testimonio del menor tiene credibilidad, por lo que consideran que su relato es coherente y podría ser veraz por corresponderse con los presuntos hechos de los que está acusado la expareja de su madre.
El menor fue el último en declarar, lo hizo tras un biombo y a puerta cerrada, por lo que no ha trascendido lo explicado. Esto ocurrió justo antes de conocerse los informes y de que el caso quedase visto para sentencia.