Una menor huye de su casa de la Sagrada Familia para evitar una agresión por parte de su padre

Varias patrullas de Policía realizaron un amplio despliegue ayer por la mañana en la Sagrada Familia para intentar encontrar a un vecino que presuntamente había agredido a su hija de 16 años. Esta consiguió refugiarse en un bar cercano después de escapar de su casa, en la que se encontraba junto a su madre y sus cuatro hermanos.

Los hechos se produjeron en torno a las ocho y media de la mañana y la joven llegó a un bar de la ronda de Outeiro, frente al pabellón de la Sagrada Familia, en el que apareció con un “forte golpe arredor do ollo dereito”, relata el propietario del establecimiento, que indica que la chica aseguró que su padre la había golpeado y que la quería “matar”, por lo que pedía socorro a las personas que se encontraban en el local en aquel momento. De hecho, uno de los clientes fue el que se ocupó de llamar a la Policía para alertar de lo que estaba sucediendo. 

La joven pudo esconderse en el baño de hombres del local antes de que su padre apareciese “ameazando” de muerte en la cafetería, en la que no encontró a su hija. “Se a engancha lle rompe os brazos”, explica el propietario del establecimiento, que relata que la menor pudo salir a la calle cuando llegaron los agentes de Policía.

Fue cuando escuchó las sirenas de los vehículos policiales cuando el presunto agresor huyó y comenzó el despliegue de agentes para localizarlo. Mientras, la menor, que aseguró que no era la primera vez que su padre la agredía, era atendida por sanitarios.

La familia es vecina de la calle del Cardenal Cisneros y algunas personas que ayer presenciaron la escena definen al presunto agresor como un “elemento”.