El plan de accesibilidad del transporte interurbano, que llevará los buses del área a desembarcar a sus pasajeros en Entrejardines, avanza sin prisa pero sin pausa. Ya va por el segundo período de alegaciones, entre las que se encuentra las de la compañía de Tranvías. Su gerente, Ignacio Prada, insistió ayer en su total rechazo al plan de la Consellería de Infraestruturas, y advirtió de que si sus alegaciones no son tenidas en cuentas puede emprender acciones judiciales, incluso llevar el plan ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Para Tranvías, el mejor punto de interconexión es Cuatro Caminos y no la plaza de Ourense o la de Pontevedra o la misma Entrejardines. En esta ocasión presenta un documento de 20 folios. Las primeras alegaciones no fueron atendidas por los técnicos de la Xunta para modificar el proyecto que, está convencido, será negativo para el tráfico coruñés. “No plantean ninguna alternativa, solo plantean lo positivo que será ir a Entrejardines cuando nosotros creemos que no lo va a ser. Va a afectar al interurbano y al urbano, a todos los servicios”.
Prada aclaró que está a favor de la accesibilidad y de una mejor interconexión entre el transporte urbano y el interurbano “Se puede y se debe mejorar, pero se tiene que hacer bien. No se puede plantear un estudio con estas omisiones y errores y afirmar que todo va a ir bien”, advierte el gerente de Tranvías para el que se trata de “un error muy grande que asumen las administraciones”.
vieja reivindicación
En opinión de Prada, el estudio solo trata de justificar una vieja reivindicación de los operadores interurbanos: recuperar los antiguos puntos de llegada que se perdieron cuando se abrió la estación de autobuses, en 1975. Pero si esta infraestructura se abrió fue precisamente por los problemas que ocasionaban ya entonces tantos buses en el centro del casco urbana.
En cuanto al motivo real por el que se llevaría a cabo un plan que, según Tranvías, es tan negativo a la Movilidad, Prada recordó que a las empresas de transporte interurbano “les tienen en un problema porque les anularon una prórroga de las concesiones que les dieron en la Xunta durante diez años”.
Esa prórroga fue declarada contraria a la ley europea por los tribunales, que obligan a celebrar un nuevo concurso. De hecho, a finales de este mismo año se va a lanzar el plan de transporte de Galicia, que va a modificar todas las concesiones del transporte interurbano y en el que se van a estudiar las nuevas rutas en toda la comunidad autónoma. Es a ese aspecto legal al que se agarraría Tranvías si decidiera emprender acciones. “No se pude estar haciendo modificaciones sustanciales si va a salir un nuevo concurso”, protesta.
El plan de accesibilidad de la Consellería de Infraestruturas, según Prada, tampoco valora el efecto de la estación intermodal, “que está a la vuelta de la esquina”. Por eso el gerente de Tranvías espera que “estas alegaciones se tengan en cuenta y no se siga una idea preconcebida”.